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La Laguna

La catedral de La Laguna, un edificio pionero

El templo fue la primera catedral del mundo en ser construida en hormigón armado. El deterioro en sus cubiertas hizo que tuviesen que demolerse en 2009

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Catedral de La Laguna, sede del Obispado de Tenerife./ ARCHIVO

La Catedral de La Laguna es uno de los emblemas de la ciudad tinerfeña junto con la iglesia de La Concepción. En Semana Santa, la catedral se viste de gala para la tradicional procesión del Cristo de Burgos, aunque este año no pudo realizarse debido a las inclemencias del tiempo. Sin embargo, el Cristo sí realizó un recorrido interno entre los arcos de hormigón armado del templo.

Los mismos arcos que comenzaron a levantarse en 1904 y que, junto con el resto de la estructura, convirtieron a la catedral de La Laguna en única en el mundo. La razón: este templo fue la primera catedral del planeta construida en hormigón armado, utilizando una técnica pionera en la época y para la que hubo que contar con un ingeniero militar.

No había empresas en Tenerife que trabajasen hormigón

El pasado 3 de abril, un tuitero publicó un mensaje en esta red social afirmando que "en Canarias tenemos una de las pocas catedrales del mundo (y única en España) construidas con hormigón, la de La Laguna". Atlántico Hoy ha recuperado un estudio de los profesores de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Hugo A. Ventura Rodríguez, Vicente Mirallave Izquierdob y Nelson Flores Medina. En el trabajo, titulado "La Catedral de La Laguna: Una obra pionera en el uso del hormigón armado en España, 1904-1913", los autores explican que fue el teniente José Ángel Rodrigo-Vallabriga y Brito asumió el reto de realizar la construcción en este material.

Construida sobre el antiguo templo de Nuestra Señora de Los Remedios, la catedral comenzó a levantarse en 1904 después de que el obispo Rey Redondo confiase a Rodrigo-Villabriga su construcción. La encomienda se llevó a cabo después de una negociación fallida con una empresa constructora radicada en Madrid: la Sociedad de Aplicaciones de la Ingeniería. No había en Tenerife ninguna empresa especializada capaz de trabajar con el hormigón y, después de caerse el acuerdo con la compañía madrileña, mandos del ejército recomendaron a Rodrigo-Villabriga, afincado en Gran Canaria, por tener experiencia previa con el hormigón armado.

Además de la técnica pionera para su construcción, el templo se levantó en tiempo récord. Solo nueve años después, en 1913, la catedral estaba terminada.

Primera del mundo

Según explican los autores en su estudio, el uso del hormigón armado comenzó con cierto retraso en España respecto a Europa, siendo las primeras construcciones en hormigón depósitos de agua en la Península. El templo, señalan los autores, fue "la primera catedral del mundo en construirse en este material". El propio ingeniero afirmó al terminar las obras que "en honor a la verdad debemos decir que es la primera catedral de hormigón armado construida, la que en menos tiempo ha visto su terminación y la más barata del mundo”.

"El ingeniero no utilizó las posibilidades expresivas del hormigón visto tal como la entendemos hoy en día. Al proyectar la catedral con criterios de diseño más próximo al estilo gótico, aprovechó la capacidad del hormigón de 'amoldarse' a la forma requerida para simular, de este modo, una solución tradicional de cantería, en la que el hormigón imita la piedra tradicional y las nervaduras en columnas, arcos y bóvedas habituales en ese estilo arquitectónico", indican los autores en su estudio.

Demolida parcialmente un siglo después por degradación

Sin embargo, errores en su construcción provocaron que, un siglo después, la catedral tuviese que ser demolida parcialmente. Así, los autores explican que "la falta de control en los recubrimientos, utilización de mezclas de cal y cementos portland en los hormigones, y una inadecuada compactación durante la ejecución, lo que ocasiono hormigones muy porosos, tuvieron como consecuencia un hormigón de una calidad baja, suficiente desde el punto de vista resistente, pero insuficiente desde el punto de vista de la durabilidad. El clima húmedo de la Laguna y un incorrecto mantenimiento, con la utilización de yesos para reparar los trozos de recubrimiento que se iban desprendiendo por corrosión, aceleraron el proceso de degradación".

Así, entre 1998 y 2008, el Instituto Eduardo Torroja realizó un importante estudio del estado de la estructura y de sus materiales. Este reveló que la armadura de la catedral se había corroído debido a la entrada de agua desde las cubiertas. Esta corrosión estaba provocando la caída de materiales en el interior del templo, lo que provocó que, en 2002, la catedral cerrase sus puertas. En 2009, tras finalizar el estudio, se comenzó con la demolición de las cubiertas y las cabezas de las columnas del templo para sustituirlas por unas nuevas.

En 2019, como ya adelantó Atlántico Hoy, la obra de la reposición de las cubiertas de la catedral de La Laguna fue premiada internacionalmente en un congreso de Melbourne por la Internacional Federation for Structural Concrete (Fib), que le otorgó el primer premio en "estructuras sobresalientes de hormigón".