- El humor para ustedes es…
Una parte fundamental de mi vida
- ¿Hay algo sobre lo que nunca harían humor?
- Personalmente no me gusta reírme de la gente, sino que me gusta reírme con la gente. Hay determinados patrones de conducta que me hacen mucha gracia, como el del perdedor con un ego desmedido, que me parecen personajes magníficos… Pero el humor debe poder hacerse con cualquier cosa. Y luego hablaríamos del gusto de cada uno.
- ¿Deben haber límites en libertad expresión, como el polémico casi de Dani Mateo sonándose en la bandera?
- No, no debería haber límites a la libertad de expresión. Porque entonces no sería libertad de expresión, sería “expresión controlada” y eso es un peligro en una sociedad adulta y democrática. Porque si no podemos decir que el rey está desnudo o que la bandera es un trapo, nos vamos a tomar en serio aquello que interese a alguien que nos tomemos enserio, y personalmente creo que nada es tan serio, y menos los relatos míticos sobre verdades inmutables: patria, bandera, corona o identidad, todos son relatos imaginarios.
- Para mí la política es una opinión que se tiene del sistema en el que se vive. ¿Cómo es? ¿cómo debería ser? ¿Se puede hacer humor sin opinar? Creo que es imposible. El humor siempre es político porque el humorista toma partido de lo que expone. Pero no hay que confundir con el humor sobre la política y los políticos, con si hay política en el humor. Yo creo que siempre hay política en el humor porque se toma una posición, incluso la contraria a la opción política del humorista (un cómico de izquierdas puede hacer un sketch haciendo de fascista, como hacía Chaplin en el Gran Dictador). Había un chiste en la época dura de la Alemania oriental que decía: ¿Sabes porqué, con la escasez que tenemos, el papel higiénico tiene doble hoja? Porque hay que mandar una copia de todo a Moscú. ¿Esto sería humor político o hacer política con el humor o simplemente, hacer humor de la realidad política?, yo creo que lo último
- ¿Qué recuerdan de su primera actuación como El Supositorio?
-Pues que estaba tan nervioso que me senté en el wáter con diarreas a las 6:00 de la mañana y a las 9:00 pensé que tenía que ir a urgencias y no podría actuar esa noche. Por cierto, ante un Guimerá abarrotado. Al final con el público en pie y aplaudiendo estaba asustado.
- ¿Cuál es el peor momento que hayan pasado sobre un escenario?
-El momento en el que antes de salir a escena con un show del que se han reído teatros llenos, sales y hay 5 personas donde caben 500. Ahí tiendes a cuestionarte si lo que haces gusta; pero claro, como el mes anterior habían ido 600 personas a verte y salieron con la mandíbula desencajada… tienes que relativizar y pensar que quizás no es el show el que no llenó la sala sino otros imponderables.
- ¿Es exportable 100x100 el humor que se consume en las Islas?
- Creo que, cuando se refieren a si es exportable, supongo que se refieren al humor costumbrista canario. Yo ahí pienso que en todo el mundo hay lugares comunes en el humor. Si haces un humor muy pegado a la sociedad canaria y a sus costumbres, y como el humor depende totalmente del contexto, pues en un contexto similar se reirán de los mismos chistes. Un chiste de un gomero en Canarias es el mismo que uno de Lepe en Andalucia o de un estonio en Letonia. Es el chiste del tonto en el país de los listos.
Si haces un chiste de Superman, wonder woman y el hombre invisible y de cómo acaba Superman teniendo sexo con el hombre invisible, se ríen en Canarias y en China. Porque el referente es universal. Luego cualquier cómico canario que conozca el contexto en el que se desarrolla su humor podrá exportar sus chistes.
- ¿Cómo hace un humorista cuando tiene un mal día tiene que trabajar haciendo reír?
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- ¿Cómo es el proceso de creación de un espectáculo del Supositorio? ¿Qué les inspira?
- Nos inspira la sociedad en la que vivimos, los estereotipos, los personajes que te encuentras en la calle… El proceso suele ser, nos reunimos y nos contamos anécdotas, chismes o artículos, o directamente venimos con un chiste, que normalmente es una situación cómica en la cabeza y la vamos desarrollando entre todos, aportando cada uno lo que le va viniendo dentro de la situación planteada. Por ejemplo: un día quedamos para ensayar en un lugar poco común, un piso con muchos vecinos y fuimos llegando de uno en uno, íbamos haciendo la broma de dar la contraseña a la entrada para saber si éramos nosotros o la policía, de repente a alguno le pareció gracioso que si eso un grupo de hombres adultos que se reunían en secreto para bailar canciones de Rafella Carrá, llegando incluso a mentir en el trabajo y a sus parejas. Y de ahí surgió el sketch.
- ¿Existe machismo en la escena del humor?
- Si nos fijamos en la cantidad de mujeres que hacen humor supongo que sí. Nosotros mismo somos 5 tíos de más de 40 y no hay mujeres en el grupo, cuando en un teatro lo normal es que el público sea al 50% de mujeres y hombres. Yo ahí, lo que creo es que hay un estigma social de las mujeres que hacen reír. Casi todos los cómicos hemos sido los payasos de la clase y eso no nos condiciona cuando vamos creciendo, las niñas quizás no sacan tanto beneficio de ser las payasas de la clase. Las mujeres suelen ver el humor como un rasgo atractivo en un hombre; famosa es la frase: búscate un hombre que te haga reír. Luego si eres el gracioso tienes más papeletas de ligar. Pero no conozco la contraria, búscate una mujer que te haga reír. No hay un beneficio social porque la mujer haga reír. Otra cosa es la mujer que le gusta hacer reír a los demás y entonces es una loca como cualquiera de nosotros, pero a nosotros se nos respeta más que a ellas.
Yo, personalmente creo que el humor es un reflejo de la sociedad y en una sociedad en la que las mujeres no tienen las mismas oportunidades que los hombres, el humor no iba a ser una excepción.