El área de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, dirigida por José Eduardo Ramírez, ha anunciado este viernes, en el pleno municipal, una inversión de medio millón de euros para acabar con los problemas que tiene la red de semáforos de la capital grancanaria. Esto se debe a que cada vez que llueve, la ciudad se queda sin algunos de sus servicios.
El paso del ciclón tropical Hermine por la isla fue la prueba que el Consistorio necesitaba para empezar a trabajar en la mejora de los semáforos. Durante esos días, una decena de ellos dejaron de funcionar y algunos, como los de Miller Bajo, seguían parados hasta el pasado jueves, más de un mes después de la tormenta.
Renovación del contrato
Ramírez aseguró la inversión tras una moción presentada por la concejala de Ciudadanos Lidia Cáceres. Esta reclamaba una batería de medidas que eviten nuevas averías en los postes reguladores del tráfico. Cáceres también reclamó la renovación del contrato de mantenimiento de semáforos que venció hace más de tres años y que se le pague a la empresa concesionaria Lumican los tres millones de euros que le debe el Ayuntamiento por los servicios prestados.
Ramírez, por su parte, defendió que el retraso en los pagos y la no renovación del contrato se debían a la falta de personal. Además, aseguró que los problemas de los semáforos de la ciudad se deben a su antigüedad.