Uno de los barrios más especiales de Funchal (término que procede de funcho-hinojo) es, sin duda, la Zona Vieja, en la que disfrutar del proyecto Arte de Puertas Abiertas, que ha transformado la calle Santa María, entre otras, en una galería de arte gracias a los artistas locales.
Vistas de la capital de Madeira con buen vino y cocina sabrosa | atlanticohoy
Para seguir abriendo boca, después de una más que recomendado Food and Wine Tour, en el que probar las bondades de la mesa madeirense, una visita imprescindible es el Mercado dos Lavradores, un paraíso de sabor y también de color en el que encontrar productos locales e internacionales como frutas tropicales, carne, pescado o verduras, así como flores y plantas exóticas, que permiten al visitante un acercamiento a la diversa y plural flora de la isla, entre las que destacan las aves del paraíso, las orquídeas o las protas.
Fundada por el navegante, explorador y caballero portugués João Gonçalves Zarco en en la primera mitad del siglo XV, Funchal debe su nombre precisamente a su localización, una bahía iluminada por el sol donde crecía el hinojo (funcho en portugués). Con los años, la población fue aumentando gracias al comercio internacional que atraía la atención de toda Europa. Así, hoy en día Funchal es una ciudad moderna que cuenta con alrededor de 112.000 habitantes.
Arriaga es una de las zonas más dinámicas de la ciudad con las Bodegas de San Francisco-Madeira Wine Lodges como insignia, además de la proliferación de cafeterías y terrazas.
Food and Wine Tour, en el que probar las bondades de la mesa madeirense, una visita imprescindible es el Mercado dos Lavradores, un paraíso de sabor y también de color en el que encontrar productos locales e internacionales como frutas tropicales, carne, pescado o verduras.