Es que así se denomina, El Capricho de Nicomedes, el establecimiento de lustroso marisco y pescado (ostras, navajas, pulpo, anchoas, zamburiñas, salmón de Uga, cazón,..), tal y como acostumbra el proveedor en su feudo del Mercado de Nuestra Señora de África, esta vez trasladado el concepto a un formato más ambicioso y que, apenas con un mes desde su apertura, está concitando gran interés en el arranque de la Avenida Anaga.
Salmonetes de Candelaria | Francisco Belín
Ubicado en una de esos enclaves históricos cercanos al puerto santacrucero, el mostrador a la vista ya nos va a dar una idea del fruto del mar que vamos a poder degustar. Por supuesto, además de las ostras y demás género que viene de Galicia, el público va a elogiar las raciones (también medias) de pescado capturado en nuestras aguas (atún, salmonetes de Candelaria, brota, gambón canario…) a un precio-calidad que animará a visitar esta agradable incorporación a la restauración de la capital tinerfeña.