La firma tinerfeña Making Solutions SL está tocada, hundida y quebrada. El Juzgado Mercantil número 2 de la capital de la Isla ha dictado un auto que ordena el concurso de acreedores “sin masa activa”, es decir, sin ningún bien en el balance al que echar mano. En tal circunstancia, el juzgado no ha nombrado administrador concursal. Si en quince días ningún acreedor lo solicita, el juez dictará sin más preámbulos la conclusión del expediente de insolvencia y la extinción de Making Solutions.
Esta tiene a sus espaldas una trayectoria de trece años en el mercado. Fundó el negocio Nadine Ángeles García Breuer en 2010, con las oficinas en el municipio de El Rosario. Tiempo después trasladó la sede a la calle Las Higueras, de San Miguel de Abona, donde ahora radica el domicilio de la compañía.
Making Solutions se venía dedicando a la promoción de espectáculos, organización de actos sociales, culturales, de empresa, etc.
La evolución de los últimos años fue alcista hasta la irrupción de la pandemia. Facturó 534.000 euros en 2019, con un beneficio de 32.000 euros. El siguiente ejercicio explotó el virus. Los ingresos cayeron a solo 24.000 euros, con un espectacular desplome del 95%. Las pérdidas se multiplicaron hasta 73.000 euros. Desde la constitución, la socia lleva aportados de su bolsillo 290.000 euros para cubrir los números rojos.
Ayudas públicas
El leñazo concursal ha ocurrido justo un año después de que la consejería de Economía, Conocimiento y Empleo del Gobierno canario le concediese una ayuda directa de 175.800 euros, destinada a paliar los efectos del Covid. Doce meses más tarde, el dinero público se ha agotado y el cadáver corporativo de Making Solutions yace en el juzgado mercantil de Santa Cruz de Tenerife, a un paso del entierro.