"Con ese vehículo no sube a este barco". Es, en resumen, la norma que Naviera Armas le ha impuesto para el trayecto Gran Canaria-Cádiz a Roberto Amorin, consejero delegado de la empresa Canary Charger de puntos de carga para vehículos eléctricos y cofundador de solocochelectrico.com, portal de compraventa de este tipo de coches. La razón: conducía un MG4 Electric, un modelo 100% eléctrico.
Aunque pueda parecer surrealista, la historia es cierta. Según explica Amorin a Atlántico Hoy -y este periódico ha podido contrastar con fuentes dentro de Naviera Armas-, la prohibición ha venido motivada por un veto explícito de Visemar, operadora del armador italiano Visentini que construyó en 2019 el barco Ciudad de Valencia para Trasmediterránea, empresa propiedad de Armas.
Riesgo de incendio
Según las explicaciones que Armas le dio al empresario y que este narra a Atlántico Hoy, Visemar prohibió hace "unos dos meses" embarcar en el buque vehículos 100% eléctricos porque habían producido incendios en otros barcos y el armador no quería asumir el riesgo.
Roberto Amorin explica a este medio que, en abril, un buen amigo suyo del entorno de solocochelectrico.com hizo la ruta inversa, de Cádiz a Canarias (en concreto a Lanzarote), con el mismo modelo de vehículo y nadie le puso ningún problema. Sin embargo, el pasado miércoles 25 de octubre el empresario recibió una llamada del departamento de pasaje de Naviera Armas en la que le explicaban que no podría subirse al barco debido a que su coche era eléctrico y que, en contraprestación, le ofrecían viajar ese mismo jueves en otro buque diferente -por tanto, de otro armador- en la línea que conecta Canarias con Huelva, también cubierta por Naviera Armas.
Le paran en el muelle
Ante estas circunstancias, Amorin se negó a cambiar su billete ya que el día y la ciudad de destino eran diferentes a lo que él había reservado, por lo que pidió formular una reclamación. Sólo recibió una dirección de correo de atención al cliente a la que mandó una queja formal, sin recibir ninguna respuesta, asegura.
Cuando llegó el sábado 28 de octubre, fecha para la que había reservado su viaje, el empresario acudió a la terminal Nelson Mandela de Naviera Armas en el muelle de La Luz y allí los empleados de la compañía le negaron el embarque. Inmediatamente, Amorin llamó a la Guardia Civil, que se personó en el puerto, aunque su mediación no logró que el capitán del buque autorizase su embarque.
Contacta al CEO de Armas
El barco zarpó hacia Cádiz, ciudad a la que llegó este lunes, y el fundador de solocochelectrico.com se quedó en tierra, sin alternativa y sin un reembolso del precio pagado por su billete -aproximadamente 600 euros-.
Roberto Amorin indica a Atlántico Hoy que ha tratado de ponerse en contacto a través de Linkedin con Kent S. Hagbarth, nuevo consejero delegado de Naviera Armas, por lo que considera un atropello a sus derechos como ciudadano. "Esa línea tiene una Obligación de Servicio Público, no es una línea ofrecida por una empresa privada sin más. Somos 100.000 usuarios de vehículos 100% eléctricos en España a los que Armas nos está negando utilizar la línea", dice notablemente enfadado a este medio.
El empresario, además de sostener que la prohibición no tiene base legal por la obligatoriedad de Servicio Público, añade que tampoco estaba reflejada en los términos y condiciones cuando compró el billete.
Denuncia en la Guardia Civil
Tras el incidente, Amorin presentó una denuncia en la comandancia de la Guardia Civil en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria. La situación le ha generado importantes inconvenientes, ya que tenía que acudir a un compromiso empresarial en Madrid y continúa en Canarias.
Para poder regresar a la Península en el corto plazo, tendrá que coger un avión, todavía sin saber si le reembolsarán o cambiarán el billete del Ciudad de Valencia. Posteriormente, en unas semanas, tendrá que volver a viajar a Las Palmas de Gran Canaria para realizar el traslado del coche a la Península.
Incendios en los barcos
El tema de los coches eléctricos en barcos es muy controvertido. Este mismo año, por ejemplo, la naviera noruega Havila Kystruten ha prohibido que se transporten vehículos eléctricos e híbridos en sus barcos, ya que los considera potencialmente propensos a incendiarse.
También en 2023, la aseguradora Allianz Global Corporate & Specialty (AGCS) ha emitido un informe en el que refleja con rotundidad el riesgo de incendio de las baterías de los vehículos eléctricos debido a la combustión espontánea de las baterías, que pone en peligro el transporte en barcos, ya sean en buques contenedores o en ferris de pasajeros.
En cualquier caso, Allianz hizo en su informe una serie de recomendaciones a las navieras que en ningún caso sugerían la prohibición de transportar estos vehículos como hizo Havila Kystruten o como ahora hace Armas por exigencia de Visemar. Por el contrario, el protocolo elaborado por la aseguradora para el transporte de estos vehículos implicaba aumentar la tripulación, instalar cámaras térmicas, colocar detectores de gases y mejorar la colocación de estos coches en la bodega para evitar que se muevan.