Enrique Martinón Armas, propietario de la cadena de hoteles THe y presidente de Grumasa, falleció este domingo en Madrid. De 81 años, el empresario conejero es una figura clave para entender el desarrollo de la industria turística en Canarias y el Caribe a lo largo de los últimos 50 años. Su hijo, Enrique Martinón García, tomará el relevo al frente del grupo de compañías.
La cadena THe, embrión del emporio, tiene hoteles en Lanzarote –Volcán Lanzarote, Mirador Papagayo, Las Gaviotas, Morromar y Oasis–, Fuerteventura –Corralejo Beach, Risco del Gato, Esmeralda Maris, Punta Marina, Atalaya de Jandía, Garden & Sea Boutique Lodging, Palm Garden y Drago Park–, Gran Canaria –Dunagolf Suites, Puerto de Mogán, Koala Garden, Lumm, Anamar Suites, Fataga, Rural Maipez, Los Calderones, Costa Taurito,Lago Taurito y Valle Taurito–, Tenerife –La Quinta Roja– y Cabo Verde –Budha Beach y Don Paco–.
Cuba y República Dominicana
Martinón inició su aventura empresarial en 1973 y fue a mitad de los ochenta cuando se centró en la división turística con dos grandes apuestas: Marina Rubicón en Lanzarote y el Puerto de Mogán en Gran Canaria. Su radio de acción no se limitó a las Islas. En 1987 dio el salto a Cuba, donde se involucró de forma decidida por el turismo desde la empresa pública Cubanacan. En la isla más grande de las Antillas mantuvo durante años una estrecha relación con Fidel Castro.
Desde Cuba pasó a México, con un hotel en Puerto Morelos, y a República Dominicana, país en el que se instaló y en el que centró buena parte de su negocio con siete hoteles repartidos entre Bávaro y Punta Cana y comercializados en alianzas con cadenas como Meliá, NH o AMResorts—.
UD Las Palmas
En 1994, junto a Luis Sicilia, abrió negocaciones con el Cabildo de Gran Canaria para la compra de la Unión Deportiva Las Palmas. La corporación insular, finalmente, optó por vender sus acciones a Gerencia Deportiva –sociedad compuesta por Germán Suárez, Ángel Luis Tadeo, Eustasio López y los hermanos Domínguez–.