El Cabildo de Gran Canaria ha declarado de interés público la planta fotovoltaica Salinetas II que la empresa Loro Parque quiere instalar en el municipio grancanario de Telde. Así lo decretó el Consejo de Gobierno insular por unanimidad el pasado 6 de septiembre. Eso sí, la compañía de Wolfgang Kiessling no lo tendrá tan fácil porque la decisión del ejecutivo encabezado por Antonio Morales lo condiciona a que, antes de recibir la licencia municipal, se elabore “una valoración exhaustiva” con reconocimiento sobre el terreno acerca de los posibles bienes del patrimonio cultural oculto que pudieran aparecer en la zona de actuación.
La resolución, que ha sido publicada este viernes en el Boletín Oficial de Canarias (BOC), está firmada por la consejera de Política Territorial y Paisaje en la corporación insular, Inés Miranda. Además, se determina que el acuerdo debe ser notificado al Ayuntamiento de Telde, a todos los que hayan presentado alegaciones a lo largo del proceso y, lo más importante, al promotor. Loro Parque, que pidió permiso al municipio en 2021, cuando estaba gobernado por Carmen Hernández (NC) —ahora gestionado por Juan Antonio Peña (Ciuca)—, quiere levantar una instalación con una capacidad de 800 KW.
Ley del Suelo
El 19 de septiembre de hace tres años, adjuntó al Cabildo un informe elaborado por el consistorio teldense donde se detallaba que el proyecto planteado por la compañía es compatible con el emplazamiento propuesto, en Suelo Rústico de Protección Agraria Especial, “donde expresamente no se encuentra prohibida en el Plan General de Ordenación (PGO)” del municipio. Ahora bien, el texto admitía que sí que carecía “del grado suficiente de detalle para poder valorar la viabilidad de las mismas”.
En esa situación, al Ayuntamiento solo le quedaba la alternativa de remitirlo a la Corporación Insular para la declaración sobre la existencia o no de prohibición expresa en el planeamiento de la Isla, así como su declaración de interés público social. Pasaron los días y, con la documentación estudiada, se comprobó que la futura planta solar se ajustaba a los requisitos establecidos en la Ley del Suelo aprobada en 2017. Además, se establecieron varios puntos que permitían argumentar la necesidad de la actuación como puede ser su carácter excepcional y justificación del interés público.
Autorizar usos energéticos
“Con carácter excepcional cabe entender que se podrán autorizar los usos energéticos siempre que se integren en actuaciones de interés público o social, y que el uso no estuviera expresamente prohibido por el planeamiento, cumpliéndose estos requisitos en la actuación de la propuesta presentada, incluyéndose la justificación sobre la contribución al fomento de las energías alternativas al objeto de reducir la vulnerabilidad de los sistemas energéticos insulares y establecer fuentes de producción energética con menor impacto sobre el medioambiente”, desarrolla.
El texto hecho público en el BOC resalta que no se encuentra expresamente previsto ni prohibido por el plan insular, ni por el planeamiento municipal. También se destaca que el proyecto se encuentra afectado por un área agrícola de valor estructurante con una superficie de 111,98 hectáreas (has) considerada un área de interés insular.
La superficie
Al respecto, el Cabildo fue claro: “Con la superficie de 0,9957 has del Parque Solar Fotovoltaico Salinetas II no se estaría vulnerando el límite establecido por el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria (PIO) para la preservación del carácter del conjunto de esta Área Agrícola Estructurante, por lo que su implantación no resultaría incompatible”.
“Considerando en dichas áreas la actividad agrícola como el uso principal a proteger frente a la implantación de otros usos y actividades de gran consumo de suelo, la producción de energías renovables mediante parques fotovoltaicos se consideraría a todos los efectos como un uso complementario del principal compatible con el mismo siempre que se garantice la prevalencia del uso principal”, prosigue.
¿Es compatible?
La Corporación Insular llegó a pedir, para poder garantizar la compatibilidad de ambos usos —agrario y energético—, que se acreditara que en las nuevas instalaciones debe garantizarse el mantenimiento de las infraestructuras existentes de carácter hidráulico, de acceso, o de cualquier otro tipo, al servicio de la explotación agrícola. En su defensa de que la iniciativa de Loro Parque cumple con la Ley del Suelo, el Cabildo no solo puso en valor su carácter excepcional, sino también que se integra en actuaciones de interés público o el contribuir a la ordenación del suelo rural.
La institución presidida por Morales advirtió, por otro lado, que “todas las actuaciones que puedan afectar a bienes del patrimonio cultural canario o supongan afección al subsuelo contarán con control arqueológico continuado y a pie de obra, que será llevado a cabo por técnico con titulación y cualificación adecuada”. Llegado el 17 de julio de 2024, la Jefatura de Servicio Administrativo de Planeamiento y Paisaje emitió un informe-propuesta para declararlo definitivamente de interés público y social.
Servicio de interés
Pone sobre la mesa que “el suministro de energía eléctrica constituye un servicio de interés general que afecta a la totalidad de la población insular de indudable interés público o social. En este sentido, a nivel nacional, la energía fotovoltaica cuenta con una posición estratégica dentro del Plan Especial de Energías Renovables”.
Resulta llamativo que en 2023 surgió una ligera diferencia entre el Cabildo y el Gobierno de Canarias. El 16 de agosto de ese año, el Servicio de Planificación de Obras y Ordenación Rural del Ejecutivo regional, emitió un informe desfavorable indicando “el parque solar fotovoltaico está proyectado sobre suelo agrario sin cultivar y advierte de la posible afección a redes de regadío con agua regenerada de iniciativa pública existente en la zona”. La corporación insular no dudó en responder el 7 de noviembre que “la producción de energía eléctrica a partir de energía solar fotovoltaica se considera inocua al no estar clasificada como actividad molesta, insalubre, nociva o peligrosa”.
Contexto
La planta fue anunciada en 2020 por el vicepresidente de Loro Parque, Christoph Kiessling, cuando inauguró un nuevo aerogenerador de cuatro megavatios que se sumaba a los cinco que generan las instalaciones fotovoltaicas de las que ya disponía la compañía y que permitían producir de manera sostenible la misma cantidad de energía que consumía.
Salinetas se ha convertido en un punto de referencia de energía limpia. A finales de 2020 se instaló el mayor molino de Canarias con una inmensa infraestructura eólica de cuatro megavatios y 86 metros promovida por Loro Parque. El objetivo de este grupo empresarial es cubrir sus instalaciones con energía verde: el Loro Parque, el Siam Park, el Acuario Poema del Mar y el Hotel Botánico.