El pasado 9 de junio el Circulo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST Tenerife) confirmó el cambio en la presidencia, en la que Javier Cabrera sucedía en el cargo a Roberto Ucelay tras ocho años al frente de la organización.
Antes de representar al Círculo por primera vez como nuevo presidente en el acto del 30 aniversario de Atelsam, asociación tinerfeña en lucha por la salud mental, Cabrera ofrece la primera entrevista desde su llegada al cargo a Atlántico Hoy para valorar los retos a los que se enfrentará los próximos cuatro años.
“Las sensaciones son magníficas, extraordinaria. Sobre todo, porque hemos recibido un apoyo y un cariño unánime por parte de los asociados y de las otras asociaciones empresariales, de todo el mundo y eso te da muchísima alegría y confianza, pero al mismo tiempo es una responsabilidad porque tienes que responder a esa confianza, apoyo, cariño”, expone para empezar el presidente”. “Uno no puede fallar, porque cuando te dan un valor tan grande como este tienes, no solo que agradecerlo, sino que trabajarlo en la misma proporción”, añade.
Retos
Esa responsabilidad que menciona Javier Cabrera va de la mano de los retos que tiene afrontar, sobre todo el propio de sustituir a Ucelay después de ocho años de crecimiento prácticamente ininterrumpido de la organización.
Así, mirando al corto plazo, Cabrera señala que el principal reto es, precisamente, “continuar la línea ascendente y de éxito que ha tenido el CEST a lo largo de toda su existencia”, incluido en los tiempos más duros de los últimos años con la pandemia como protagonista, así como de “consolidación”.
Más específicos
Centrando la mira en retos más concretos, el presidente del CEST apunta al “fortalecimiento entre las relaciones comerciales y los asociados y convertir el Círculo en un elemento dinamizador que te ayude a mover la economía de la comarca sur de Tenerife”.
En este sentido, especifica que si fortalecen estas relaciones “fortalecemos que se conozcan, que tengan actividad comercial entre ellos, que sus ventas de trabajo aumenten y que, indudablemente, estaremos ayudando a que la economía también mejore”.
Necesidades
En cuanto a qué requiere la organización empresarial, Cabrera mantiene las reclamaciones que vienen de la etapa de Ucelay. “Son dos cosas”. Primero, un marco normativo claro en el que no sean tan costosas la gestiones o la obtención de cualquier tipo de permiso licencia. Es terrible y está lastrando la economía y poniendo en compromiso muchísimos proyectos que podrían ayudar a que nuestra situación mejore”.
La segunda -profundiza Javier Cabrera- se refiere a las infraestructuras. “Hemos tenido un crecimiento bueno, pero no ha ido acompañado de una inversión proporcional en infraestructura de todo tipo. No solo viaria, sino también educativas, sanitarias, sociales…”.
De esta manera, esgrima que esas reivindicaciones “son necesarias” para continuar la línea de éxito y “consolidar a Tenerife como lugar privilegiado, puntero, con una potencia turística mundial. Debemos mimarla y respetarla porque es la que nos ayudado a conseguir mejor calidad de vida”.
Petición a los nuevos gobiernos
Con los pactos de gobierno recién salidos del horno, el presidente del CEST les pide a los nuevos líderes municipales insulares y regionales, que “contribuyan con un gobierno serio, tranquilo, que ayude a bajar el nivel de crispación social que padecemos”.
En este contexto, aclara que Canarias, por extensión, no puede seguir viviendo en el “enfrentamiento que estamos teniendo entre sectores de diferentes tipos”. Además, solicita a los gestores “trabajo, trabajo y más trabajo, pero estamos completamente seguros de que eso lo van a ser y que lo tienen en la cabeza”.
Cambio de turismo
Uno de los temas que ha generado esa importante crispación social en el Archipiélago, y más concretamente en Tenerife y en la comarca del sur que él representa en cuanto al sector empresarial, es el debate sobre la necesidad, o no, del tipo de turismo que recibe Canarias.
“A mí me suena tópico esto del cambio. ¿Qué es lo que quieren cambiar exactamente? La industria turística, como cualquier otra industria, tiene que seguir evolucionando y adaptándose a los gustos del nuevo mercado, al cliente del siglo XXI y a las nuevas tecnologías. Tiene que continuar su evolución”, expone. “No es lo mismo un cliente de hace 40 años que uno de hoy en día. Y eso Tenerife y Canarias lo está haciendo muy bien”, añade.
Así, Cabrera continua su reflexivo argumento con que hay que “seguir evolucionando y actualizando esta industria y revisar hasta las distorsiones que genera, porque toda industria y actividad económica genera distorsiones. Eso lo estamos haciendo ahora mismo de la mano de la empresa privada, la administración y la colaboración pública-privada, pero hay que generar alarmismo de que tenemos que cambiar ese turismo… ¿Adónde?”.
El presidente del CEST comparte que puede estar de acuerdo con el mensaje, pero pide a quienes lo solicitan que aporten ideas concretas. “¿Qué significa cambiarlo? Es lo que hemos hecho toda la vida. Adaptándonos a los clientes y a los cambios de la industria del sector turístico. No hay mayor prueba de que lo que estamos diciendo es una realidad que Tenerife se ha ido consolidando en el tiempo como uno de los destinos favoritos a nivel mundial”.
Turismo de masas vs. de calidad
Respecto a la idea de grupos activistas y más sectores sociales de todo el Archipiélago de cambiar el modelo de turismo de masas por uno de más calidad con menos visitantes, Cabrera apunta que “puede ser una idea”, pero insiste en que no conoce ninguna propuesta para ello de quienes lo piden.
¿Qué hacemos con los edificios de apartamentos que están en marcha con el empleo que estos apartamentos tienen? ¿Cuál es el plan que tienen para reconvertir el sector?”, pregunta al aire antes de responderse a sí mismo desde su posición empresarial. “Yo creo que eso ya se está haciendo por parte de muchas empresas. Muchísimos edificios están recalificando y subiendo su categoría. Apartamentos que eran de dos estrellas se han convertido en hoteles de cuatro estrellas. Todo esto ya se está haciendo, pero si tienes una mejor idea de un cambio más rápido, fantástico. Póngalo sobre la mesa, pero con cosas concretas, no con tópicos”, espeta.
Ecotasa
Sobre la hipotética ecotasa, Cabrera mantiene la línea del discurso. “La ecotasa está llena de buenas intenciones, pero de buenas intenciones está el infierno lleno”, señala. “Nosotros ya vemos cómo es la situación actual, donde se ha recaudado más que nunca por el crecimiento de los ingresos por actividades derivadas del turismo gracias al crecimiento de los ingresos fiscales por la vía del impuesto de sociedades, que en los últimos años ha sido una barbaridad”.
Roberto Ucelay
Tras ocho años en el cargo, Roberto Ucelay dejó en buenos términos la presidencia a Javier Cabrera, quien trasladó a través Atlántico Hoy agradecimientos hacia su predecesor. “El trabajo que ha hecho ha sido fabuloso”, sintetiza.
Así, reseña que en un momento dado “le dio un gran impulso al CEST” gracias a esas características personales que tiene “emprendeduría, arrojo, osadía, valentía, muchísimas cuestiones, que le han dado un avance al Círculo impresionante”.
Por último, confiesa que “si ahora estamos donde estamos se debe a esa cuestión. Ya le dije cuando se ratificó mi nombramiento como presidente. “Ojalá a mi sucesor en el futuro le puedo entregar un CEST que esté, como mínimo, en las magníficas condiciones en la que me lo acaba de entregar Roberto a mí y a la nueva junta directiva”, finaliza.