Guacimara Cabrera es la gerente de Dromemilk Camel Bio Farm en Fuerteventura, la mayor granja de camellos de Europa donde se han impulsado los únicos bombones a base de leche de camella.
Cabrera ha logrado recientemente el premio 100 Charter Gran Canaria, y no solo ha trabajado en la creación de estos bombones, sino también en la divulgación de la biodiversidad, flora y fauna en cautividad y protección de áreas protegidas, desarrollo de proyectos de reconstrucción así como la mejora de hábitat.
En una entrevista concedida a Atlántico Hoy nos cuenta cómo fue el proceso de impulsar Dromemilk, la granja camellar más grande Europa apuesta de Oasis Wildfride, y cómo se ha dado el siguiente paso de comenzar a apostar por los productos derivados de la leche de camella.
Además ha dado su punto de vista como emprendedora sobre la innovación en la ganadería de las Islas, así como de la necesidad de que se conciencie sobre el cuidado de las especies, ya que para ella ''es inviable que las actividades que se hagan con otros seres vivos no sea con respeto y concienciación''.
Granja camellar única
Para Guacimara Cabrera este reconocimiento otorgado por 100 Charter es algo que ''siente en conjunto'' debido a la trayectoria ''de toda la gente que está detrás del proyecto'', porque como cuenta, hacer la granja fue algo muy complicado. Se trató de una apuesta de Oasis Wildfride con el fin de hacer valer la raza autóctona. Con más de 400 ejemplares de camellos, se trabaja en la producción de leche y en la conservación de una raza en peligro de extinción.
En 2002 comenzaron las investigaciones sobre las propiedades de la leche y en 2011 pusieron en marcha la primera granja piloto para estudiar la viabilidad. ‘’Durante tres años estuvimos con ese proyecto piloto con distintas universidades colaborando con nosotros, entre ellas la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Averiguamos propiedades importantes de la leche y conseguimos resultados positivos de la viabilidad económica como proyecto, y fue así como dimos el paso para hacer la granja. La gente se pregunta cómo hemos tardado tanto, pero es que no había precedentes administrativos ni jurídicos. Hemos abierto una puerta que no existía’’, apunta.
Después de todo el proceso, y de haber dado el paso de crear los productos derivados de esta leche como son los famosos bombones, ahora la idea es establecerlos y posicionarlos en el mercado. El objetivo también pasa por continuar posicionando la marca con otros derivados como puede ser el yogur o la leche, así como la cosmética. ''Los primeros productos que van a salir a la venta, creemos que en el próximo mes, son los bombones y la leche --en polvo y fresca--, y de forma consiguiente trabajando en el queso mozzarella, que son productos muy demandados actualmente'', puntualiza.
20% de consumo mundial
El interés por la leche de camella en el exterior va en auge. Según comenta Cabrera, los datos muestran que un 20% de la población global la consume actualmente. ''Sabemos que existe una gran demanda del producto, pero uno de los índices más positivos es que en Europa en los últimos ocho años han abierto 50 granjas de producción láctea camellar, y en Francia o Alemania existen granjas que venden sus productos y se pueden conseguir por internet''.
En base a esto, Guacimara Cabrera explica los beneficios que tiene el camello como animal. ''Aunque no tome agua, produce leche, y se adapta a las temperaturas, entre otras cosas'', afirmó. En este sentido considera que el Archipiélago es sumamente importante en cuanto al camello porque tenemos la mayor cabaña de toda Europa. ''Canarias tiene que sacar su mercado de venta de camellos al exterior, pensar en la producción y en tener aquí el equilibrio para después ser los productores para el resto de Europa en España’’.
Ocio con causa
Pero para ella lo más importante es que todas las actividades que se realicen sean bajo el paraguas del término ‘ocio con causa’. ‘’Estamos trabajando con naturaleza en peligro de extinción, educando en cada visita a cada cliente que viene, ya que tratamos de inspirarles para que salgan con un mensaje claro. Dromemilk es una experiencia donde se conecta con el animal y lo respetan. A día de hoy para mi es inviable que las actividades que se hagan con otros seres vivos no sean con respeto y concienciación’’, afirma.
En este sentido la gerente considera que aún queda mucho por hacer en cuanto a concienciar a la sociedad sobre el cuidado de las especies y los espacios naturales. ‘’No solo es contar lo que importante que es actuar, sino decir en qué puede ayudar la persona’’.
Ser joven y emprender
Fijándose en su trayectoria, y siendo consciente de la situación actual, entiende la complejidad que existe hoy en día para innovar, aunque insiste en que perseguir el objetivo es una de las claves para que salga adelante un proyecto. ‘’Me viene inculcado porque en nuestro caso es una ganadería que no existía. Veo a jóvenes que trabajan en ganadería camellar o de vacuno con proyectos interesantes y tenemos cantera joven, con ganas, y con modelos únicos desde Canarias’’, apunta.
En este sentido considera que los modelos establecidos en cuanto a tipo de ganadería en las Islas ''están muy desactualizados'', destacando que existen otras líneas y otros modelos incluso para el ganadero de formas de trabajar. ''No es suficiente con tener animales y la pasión, aunque es lo más importante, pero la información y el asesoramiento actualizado es fundamental'', concluye.