Eustasio López González, procesado la semana pasada por un presunto caso de abuso de menores, es el más destacado empresario del sector hotelero de las islas como el accionista mayoritario del potente Grupo Lopesan y, gracias a ello, figura entre los cien españoles más ricos. Sus intereses abarcan el sector turístico, las promociones inmobiliarias y la construcción.
Hoteles y centros de rehabilitación infantil
En la primera de las actividades, posee siete grandes complejos hoteleros en el Archipiélago. Fuera del país dispone de cuatro en Alemania, tres en Austria y uno en República Dominicana.
Además, Lopesan gestiona cinco centros de rehabilitación infantil en los dos países centroeuropeos y sendas instalaciones del mismo género en Canarias. Un dato que no es baladí teniendo en cuenta la naturaleza de los hechos que se le imputan.
Invertur Helsan
El consorcio turístico-promotor está domiciliado en la calle Concepción Arenal, de Las Palmas. Las inversiones se articulan por medio de la sociedad de cartera Invertur Helsan, cuyas dimensiones son enormes. Por su volumen constituye el mayor grupo de las islas y también figura entre los más capitalizados de España.
Según las cuentas consolidadas de Invertur, consultadas por Atlántico Hoy, los activos subieron el año pasado de 1.550 a 1.608 millones.
Predios y una liquidez exuberante
Esta ingente masa de bienes está representada por dos partidas principales.
Una corresponde a hoteles, inmuebles en arrendamiento y terrenos edificables, que suman nada menos que 900 millones de valor bruto. El balance alberga, entre otros, 3,6 millones de metros cuadrados en Pino Seco (Arguineguín), Meloneras y San Bartolomé de Tirajana, en la isla de Gran Canaria.
El otro epígrafe relevante del activo de Invertur es la tesorería, que alcanza los 680 millones. Se trata de cuentas corrientes, imposiciones a plazo fijo y depósitos con un vencimiento inferior a los tres meses. Es decir, sus recursos financieros son de materialización inmediata. El patrimonio (capital más reservas) de la sociedad holding está contabilizado en 520 millones.
Desplome de los ingresos
Los estados contables revelan el fuerte impacto de la pandemia, debido al cierre y las restricciones que sufrió su cadena de alojamientos, la cual aportaba el grueso de las ventas.
En 2020, la red hotelera facturó solo 116 millones, frente a los 276 millones de 2019. En cambio, los negocios inmobiliarios y la constructora mantuvieron el tipo.
Números rojos
Invertur saldó el pasado ejercicio con una cifra de negocio de 150 millones, un 53% menos.
El cambio de signo que experimentaron los resultados fue tremendo. El grupo Lopesan pasó de 38 millones de beneficio en 2019 a unas pérdidas de 48 en 2020.
Es de destacar que a los ingresos ordinarios se añadieron fuertes subvenciones a fondo perdido de las administraciones públicas, cifradas en 17 millones.
Gobierno de Canarias y ministerio de Economía
Parte de esas ayudas corresponden al Gobierno autonómico, que fueron destinadas a la construcción de un campo de golf y a edificar viviendas de protección oficial en Pino Seco, ambas en Gran Canaria, donde la influencia del grupo es considerable.
Asimismo, Lopesan percibió subvenciones del ministerio de Economía para financiar sus complejos turísticos Hotel Villa del Conde y Gran Hotel Costa Meloneras. Por último, tres compañías del grupo fueron agraciadas con auxilios económicos para que pudiesen sufragar la compra de inmovilizado material.
Propietarios
Dada la situación de números rojos vivida en 2020, la junta de socios acordó no distribuir dividendos. En 2019, se repartieron casi 5 millones.
Eustasio López es el accionista mayoritario de Invertur. Controla el 57,5% por medio de dos entidades instrumentales, denominadas Invertur Helsan y Rofradi Inversiones. Su hermano Francisco Aurelio López González posee el 42,5%, canalizado en la sociedad de su pertenencia Erga Inversiones y Proyectos.
El medio centenar de compañías que se guarecen bajo el paraguas de Invertur emplean a 4.100 trabajadores, 600 de ellos en Alemania y 700 en República Dominicana.