“Hola, ¿cómo te llamas? ¿Dónde trabajas?”. Un saludo y dos preguntas sencillas que para Ted Stresen-Reuter son fundamentales. Este americano afincado en Gran Canaria desde hace casi 20 años es el CTO de la empresa Secret Source. Cuando llegó a la Isla quiso buscar grupos de desarrolladores que se juntaran para hablar del sector, pero no encontró nada que lo convenciera. “Nadie se ofrecía a hablar de nada aunque nos reuniéramos”, afirma.
Stresen-Reuter venía acostumbrado a quedar con programadores en Chicago cada mes para abordar novedades que “a veces era tecnologías promovidas por empresas grandes o software libre”. Tras detectar esta necesidad en el Archipiélago, creó a finales de 2022 el proyecto GofiGeeks para que los desarrolladores grancanarios pudieran crear sinergias y conocerse.
El primer encuentro
El primer encuentro fue a finales de septiembre en forma de fiesta. “Fue un exitazo, vinieron 140 personas, un montón de empresas locales, universitarios… No podía haber tenido mejor aceptación”, dice orgulloso. A partir de ahí ya han hecho reuniones mensuales en 2023 y tienen planificados seis meses de actividades.
El próximo 1 de julio tendrán una nueva reunión y harán dos talleres en un solo día. No descartan hacer algo en agosto y a finales de octubre posiblemente llevarán a cabo otra fiesta.
“Yo veía que aquí la gente no se movía, no salía de su grupo reducido social. No tienen contacto con el mundo exterior, salvo por algún vídeo de Youtube o Twitter. Es triste que haya tanta gente y que no se vean nunca”, reflexiona.
Generar conexión
GofiGeeks quiere recibir a “gente de mente abierta” en las citas que tienen cada mes en las instalaciones de Infecar que les ha cedido la Sociedad de Promoción Económica de Gran Canaria (SPEGC). Stresen-Reuter tiene claro cuál es la clave del éxito que han cosechado hasta el momento. Para él ha sido fundamental el momento donde hacen “un rompehielos” y las personas tienen que comunicarse. “De esa manera generan una conexión que se siente, que se percibe”, exclama.
Miguel Ángel Pérez, programador y compañero de Stresen-Reuter en Secret Source, está encantado con la iniciativa. “Yo como desarrollador siempre he echado en falta aquí en Canarias que se creara una comunidad así”, admite. “En temas de desarrollo te ayuda a estar al tanto de qué es lo que ocurre fuera. Lo que pasa cuando estás dentro de una empresa es que tienes la vista muy acotada en lo que estás haciendo”, añade.
Poco interés
Pérez considera que los desarrolladores viven en un aislamiento que se intensificó después de la pandemia por el trabajo en remoto. Algo que “ha impedido que establezcas relación con gente de tu mismo sector”.
Otra de las empresas que están presentes en GofiGeeks es Biting Bit, una agencia software alemana con sede en Gran Canaria. Uno de sus programadores es Fernando de Sande, dedicado a la profesión desde el año 2004 y relata que la primera compañía en la que trabajó “no tenía mucho interés en colaborar con demasiadas empresas”.
"Hablar de lo que sabemos"
De Sande reconoce que “cuando Ted sacó esta convocatoria nos pareció muy interesante porque era algo que nosotros echábamos de menos”. Considera que si no ha llegado antes es porque “no todo el mundo tiene las ganas y el entusiasmo para proponer la creación de una comunidad”. Sobre GofiGeeks declara que lo ha ayudado a conocer más compañeros y a hacerse una idea de lo que se mueve en el mercado.
María Guerra trabaja como programadora en la consultora LeanMind, quien valora poder nutrirse de los conocimientos de otras personas. Asegura que cuando entró en el oficio no pensaba en que su sector debería conocerse más, “pero con el tiempo me di cuenta de que quería hablar con otras personas, hacer talleres, tener charlas… Hablar con gente cara a cara y poder compartir lo que sabemos”.
Diferentes tecnologías
De cara al futuro, Guerra piensa que GofiGeeks logrará que “la gente se interese por otras tecnologías que a lo mejor no conocían”. “Cuando sales de estudiar no te enseñan todo lo que hay por ahí. Si no te mueves, no vas a conocer sino las cosas que aprendes en la universidad”, atestigua.
“Últimamente hay más trabajo en remoto. Pero el hecho de ir presencial la gente lo agradece de vez en cuando. Permite tener una conversación más relajada que por Internet. Fluye de manera mucho más natural”, sostiene.