A pesar de la recuperación económica que durante semanas benefició a los comercios de las islas, y sobre todo al sector hostelero, las nuevas restricciones causadas por el gran aumento de contagios en las islas ha hecho que la facturación de la hostelería se encuentre un 60% por debajo de la previsión.
Canarias ha registrado en las últimas horas 5.261 contagios, siendo contabilizados 2.889 de ellos en la isla de Tenerife. Por esto, la isla cambió de nivel 3 debido a la alta incidencia de casos, lo que provocó que negocios del sector hostelero como bares o restaurantes se viesen afectados ante una época donde se da la mayor facturación del año.
Ahora, los locales tinerfeños tendrán que cerrar como máximo a la 01:00 y con un aforo limitado a seis personas en interiores y exteriores salvo convivientes, lo que ha provocado la cancelación de celebraciones de cenas o encuentros navideños de trabajo, familiares o amigos. Por su parte, el ocio nocturno es el ámbito que más se ha visto afectado debido a estas medidas, impidiendo que puedan abrir los negocios con las expectativas que se tenía para Fin de Año.
Duro golpe para la hostelería
Los casos de COVID en Canarias han aumentado aproximadamente más de un 70% en comparación a semanas donde la incidencia en las islas era prácticamente baja. Estos datos han supuesto un duro golpe a la hostelería, ya que islas como Tenerife subieron hasta el nivel 3 con restricciones horarias y de aforo. Ruth Dorta, gerente de la Asociación Empresarial Zona Centro, señala a Atlántico Hoy que la hostelería comenzó a recibir cancelaciones por la subida de la Isla a nivel 3. A su vez apunta que ‘’la mayoría de locales de restauración van a hacer el turno de cena un poco más temprano de lo habitual para que la hora de cierre no les afecte’’.
Ramón Fariña, presidente de la Asociación Empresarial de Restauración y Ocio de la provincia de Santa Cruz de Tenerife (AERO), también comenta a Atlántico Hoy que la peor parte se la lleva el ocio nocturno ya que ‘’obviamente vuelve a estar en 0 porque no puede abrir’’. Por otro lado, Fariña resalta que la mayor parte de los restaurantes que iban a abrir en Nochevieja han cancelado y están dedicando sus esfuerzos a realizar pedidos para que los clientes se los lleven a casa. ‘’La situación es muy complicada porque la reducción de aforo en la época de mayor facturación del año, junto a la de comensales por mesa, hace que la facturación esté un 60% por debajo de la previsión’’. Además, añade la caída del número de turistas que afecta de manera directa a la restauración que depende de ellos.
Por ahora, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha desautorizado el toque de queda para Nochevieja y Reyes que había solicitado el Gobierno de Canarias para las islas que estuviesen en nivel 2 y 3 para evitar que continúe el aumento de contagios por Covid. Esto supone un ‘’respiro’’ para los hosteleros ya que podrán abrir hasta la hora estipulada por las restricciones.