El Ilustre Colegio de Administradores de Fincas de Santa Cruz de Tenerife (CAAFF) y el medio de comunicación digital AtlánticoHoy celebrarán este martes 24 de noviembre, a las 18.00 horas, la Mesa de trabajo sobre okupación de viviendas y derechos de los propietarios.Este encuentro busca tratar la actualidad de este movimiento en Canarias, y concretamente en Tenerife, desde el punto de vista de los administradores de fincas, abogados y la delegación de participación ciudadana, una realidad que cada vez tiene más casos y donde este medio de comunicación, en colaboración con el Colegio, persiguen informar sobre el estado actual de este fenómeno en la isla.Para acercarnos a algunas de las claves que compartirán en este encuentro los administradores de Fincas, hemos hablado con Ana Isabel Rancel y José Antonio Acevedo, quienes hacen hincapié en la complejidad de esta problemática.Ana Isabel Rancel cree que las causas del actual repunte en la ocupación ilegal es que el asunto "se demora mucho en el Juzgado por su saturación, por lo que no se tramita tan rápido como debería". Sin embargo, no cree que este aumento del movimiento okupa esté relacionado con que la covid-19 haya dejado a más personas sin recursos. "La ocupación ilegal ha aumentado en los últimos cinco años, no solo en este último", asegura.Rancel gestiona comunidades de propietarios especialmente en la zona Sur de Tenerife, donde "sí está habiendo una incidencia muy grande". De hecho, ella misma se encarga de varios edificios donde existen casos de esta problemática. Asegura, sin embargo, que el rechazo a la misma "no es aporofobia, que no quieran tener a personas con menos recursos". Señala que estos vecinos, en las comunidades que gestiona, han entrado ilegalmente ayudados por mafias de ocupación. "Les han indicado una vivienda vacía, por la causa que sea, y se han metido dentro".Pero no son grandes mafias de la okupación, defiende, por su parte, Acevedo, quien también tiene como área de actuación el sur de Tenerife. "Hay pequeñas organizaciones por zonas, pequeñas mafias. Y están organizadas por los propios que alquilan y venden okupaciones, que luego traspasan a otros, falsificando contratos", explica el administrador de fincas.Respecto a la situación en el sur de la Isla, asegura que "si me atreviera a hacer una estadística, podría decir que en cada comunidad hay okupas y en algunas comunidades entre un 2 % y un 5 % del propio edificio". Además, subraya que "quienes están okupando sobre todo son gente que incluso trabaja, y les interesa okupar porque no pagan alquiler, han cogido esta nueva moda".
"De los 300 okupas que yo conozco y tengo en comunidades de propietarios, solo 30 están en propiedades de un banco", explica Acevedo. El resto de viviendas okupadas pertenecerían a extranjeros que vienen de vacaciones, y familias tanto residentes en las islas como no"