El
certificado de vacunación europeo que facilitará los viajes de personas ya vacunadas estará previsiblemente listo para el
mes de junio con el objetivo de
recuperar la movilidad este verano, ha asegurado la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya."El procedimiento de aprobación del certificado que impulsamos en la UE y la OCDE se espera que esté aprobado en junio", ha asegurado la ministra, quien ha precisado que
"una cosa es su aprobación y otra cuándo cada país lo irá aplicando".En declaraciones a EFE, González Laya ha subrayado que "impulsa y apoya" la puesta en marcha de un certificado europeo de vacunación cuyo objetivo es "
facilitar el retorno a la movilidad segura y ordenada, con respeto a las reglas de privacidad, que respete los derechos de los ciudadanos y que facilite la movilidad, no que la permita o impida".Se trata, ha explicado de reconocer de manera oficial el
"riesgo menor" que supone una persona ya vacunada", lo que
"no quiere decir que las personas no vacunadas no puedan moverse".Asegura que
los no vacunados "podrán ejercer su derecho a la movilidad pero sometidos a unas condiciones diferentes".El certificado deberá ser
"respetuoso con los derechos individuales y con el hecho de que tendremos que ir acomodándolo cuando haya una inmunidad colectiva en la ciudadanía".
Pruebas previas
Según González Laya,
la puesta en marcha del certificado la decidirá cada país "cuando haya salido de la situación de riesgo; en estos momentos no sería prudente, pero que estemos listos cuando hayamos escalado la vacunación".Ello no excluye que se puedan hacer
experiencias pilotos con certificados con grupos más pequeños o en regiones más específicas, ha apuntado.Los países de la UE alcanzaron este miércoles una posición común para iniciar las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre el certificado de vacunación, que
no será un pasaporte que garantice la total movilidad, y permite a los Estados miembros la posibilidad de aplicar restricciones a su uso.Así pues,
no será un "pasaporte sanitario" que permita automáticamente que los ciudadanos recuperen la libertad de movimientos en la UE, sino un certificado que permita recuperar la movilidad con mayor seguridad.Según informó el presidente de la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo, el socialista español Juan Fernando López Aguilar, la Eurocámara velará para que se respeten los derechos de "igualdad y no discriminación".Por tanto, pedirán que los datos de los certificados los almacene el país de origen, y no el de destino, que el documento solo sirva para viajes y que tenga fecha de caducidad hasta que la OMS dé por acabada la pandemia.El certificado, según el texto provisional, será gratuito, en formato electrónico o en papel, estará disponible en inglés y en la lengua oficial del país que lo emita y tendrá "un período de aplicación de 12 meses".