La cadena canaria Cordial Hotels & Resorts ultima las negociaciones para asumir la gestión de un hotel en La Habana. La compañía, que desde hace casi una década tenía en el radar la posibilidad de expandir su negocio a Cuba, parece en disposición de afrontar su primer proyecto internacional tras consolidar, durante los últimos años, su marca dentro del mercado canario —y el grancanario, en particular—.
El desembarco de Cordial en Cuba, según pudo confirmar este periódico —desde fuentes del entorno de la propia empresa y del sector—, pasa por firmar un contrato de administración y comercialización de un hotel en la capital de un país donde todos los establecimientos turísticos son propiedad del Estado —ya sea a través de sociedades mercantiles como Grupo Gaviota, Grupo Cubanacán, Grupo Gran Caribe e Islazul—.
Expansión
El interés de la compañía que dirige Nicolás Villalobos por Cuba no es nuevo. En 2015, igual que Lopesan y Binter Canarias, Cordial ya se planteó invertir en la isla. Cuatro años después, la empresa inauguró Mogán Paraíso en Gran Canaria, un establecimiento de cinco estrellas que marcó un acelerón de la compañía.
Desde entonces, ha inaugurado varios hoteles más (propios o franquicias, la mayoría en el casco antiguo de Las Palmas de Gran Canaria): Cordial Mogán Solaz, Cordial Santa Águeda, Cordial Marina Blanca, Cordial Peregrina, Cordial Malteses, Cordial Plaza Mayor de Santa Ana o Cordial La Niña de Vegueta —a la espera de la apertura del Cordial Galdós Jardín—.
Cordial, que arrancó con su actividad en 2004 y en 2023 ya facturó 70 millonas de euros, tiene en su consejo de administración como consejeros delegados mancomunados a José Ignacio Zabaleta y Pedro Antonio González. Además, figura como consejero y secretario Marcelino Villalobos de Paiz.
Modelo cubano
Para trabajar en Cuba, dentro del sector hotelero, una compañía extranjera puede hacerlo de dos formas: o constituir una empresa mixta con la parte cubana —y aportar la financiación que no tienen las sociedades locales— o firmar un contrato de administración y comercialización hotelera (CACH) que puede incluir o no un financiamiento para la remodelación del inmueble —modalidad con la que el gobierno caribeño pretende captar a grandes cadenas internacionales—.
El Ministerio de Turismo cubano, el año pasado, puso a disposición de inversores internacionales, a través de la Cartera de Oportunidades del Sector del Turismo, 87 proyectos: 32 en la modalidad de empresas mixtas y 55 como contratos de asociación económica internacional, 41 de comercialización y administración hotelera, 11 de administración de servicios, y tres con fondo común.
Las empresas turísticas españolas gestionan unas 30.000 habitaciones en la isla caribeña, de las cuales unas 3.000 son en régimen de empresa mixta y el resto en régimen de contratos de administración hotelera (CAD) —la mayor parte de estos se centran en hoteles de cuatro y cinco, lo que convierte a España el líder indiscutible en estos dos niveles—. Cuba fijó en 2018 su récord de visitantes con 4,71 millones de turistas, con unos ingresos de 2.782 millones de dólares, y el sector tiene buenas perspectivas a largo plazo.