En Canarias, la empresa española Koppert está fomentando activamente la implantación del control biológico en plataneras, uno de los cultivos más importantes del archipiélago. “Actualmente, Koppert facilita a los productores de plátano su transición a una agricultura sostenible y sin residuos de plaguicidas con una amplia gama de soluciones biológicas 100% naturales”, expone la compañía.
En 2003 comenzaron a trabajar en el control biológico de las principales plagas del cultivo de la platanera —poniendo el foco, sobre todo, en la araña roja—. Luego, en 2008, fue cuando Koppert se trasladó a Canarias con un proyecto de I+D especializado en la platanera de las islas.
Plataneras
Tras los años de trabajo, “hemos desarrollado protocolos propios que son muy eficaces, basados en las sueltas de enemigos naturales, alguno de ellos autóctono”, continúan explicando. Actualmente, la empresa española gestiona el control biológico de plagas en más de 800 hectáreas de platanera, de forma directa o vía distribuidor —en Canarias es el 13% del volumen de negocio de la compañía—.
Desde 2013, la producción europea estableció la aplicación obligatoria de la Gestión Integrada de Plagas. Este concepto obliga a los productores de la Unión Europea al bajo consumo de productos fitosanitarios, dando prioridad a los métodos no químicos, de manera que se opta, en todo caso, por las prácticas y los productos con menos riesgo para la salud humana y para el medio ambiente.
Controles biológicos
Entre los trabajos que está desarrollando Koppert en España se encuentran la optimización del “manejo de nematodos entomopatógenos —logran controlar insectos plaga entrando al cuerpo de las mismas— para el control de picudo de la platanera”, considerada la principal plaga del cultivo. En segundo lugar, el uso de Spidex Vital Plus contra la araña roja, “un producto novedoso en el cultivo de platanera”. Por otro lado, el uso de Vicifix o la adaptación de fitoseidos exóticos al cultivo de la platanera. “Este mini ensayo se va a hacer en la Península, queremos evaluar la adaptación al cultivo que tienen algunos ácaros que, por el momento, no podemos introducir en Canarias”.
También están realizando un diseño para el cultivo de mesetas de plantas reservorios, “estudiando y haciendo seguimiento en campo de combinaciones de plantas que puedan ser aplicables como reservorios en el cultivo”. Finalmente, Kopper colabora con el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) “para buscar herramientas biológicas para el control de moscas blancas espirales”. En conclusión, el objetivo es “impulsar el control biológico en cultivos emblemáticos de Canarias para dejar de utilizar pesticidas químicos”.