El Juzgado Mercantil número 1 de Santa Cruz ha decretado el concurso voluntario de Esquilón Gestión SRL, pero no ordena la intervención de sus operaciones. El balance de la firma carece de activos, por lo que dicha instancia concede quince días a los acreedores para que soliciten el nombramiento de un administrador concursal.
En caso contrario, el juzgado ordenará la conclusión del expediente y la extinción de Esquilón. En ambos supuestos, el cobro de las deudas pendientes es prácticamente imposible, pues la ruina es total. En el último trienio apenas ha facturado un céntimo y los fondos propios son negativos.
Consejos contables y fiscales
La firma se dedica a labores de gestoría o consultoría, es decir, a asesorar a empresas, profesionales y particulares sobre materias contables, fiscales y otros servicios similares. Parece claro que no ha sabido prestarse asesoramiento a sí misma, pues de lo contrario no habría acabado en una insolvencia.
Esquilón tiene su sede social y oficinas en la calle Camino las Toscas, de Puerto de la Cruz. La sociedad se fundó en 2003. Un año después tomó el control Víctor Ramírez Pérez, quien ha ejercido desde entonces de administrador único.
La declaración de fallido no es la primera incidencia que registra la compañía. En 2016 los juzgados de lo social la declararon en insolvencia, por descubiertos con la Seguridad Social.
Desguace de Transportes Hermanos Domínguez
Al margen de este incidente empresarial en Santa Cruz, los tribunales mercantiles canarios han aprobado el plan de liquidación de Transportes Hermanos Domínguez SL, censada en la calle Juan Rejón, de Las Palmas. La compañía se estrelló en un concurso de acreedores cuatro años atrás.
La liquidación dictada por los tribunales implica que la empresa no tendrá continuidad y está abocada a desaparecer del mapa, una vez se ultime la venta de los haberes sociales.
La transportista se constituyó en 1977. Su última administradora ha sido María Inmaculada González Domínguez.