La compañía Wurstquelle SA, productora de salchichas y otros elaborados cárnicos, va directa al desguace. Un auto del Juzgado Mercantil número 2 de Santa Cruz, que tramita el expediente de quiebra, ha decretado la apertura de la fase de liquidación. Esta medida significa que la empresa no tendrá continuidad y está abocada a la disolución y extinción como persona jurídica.
Las instalaciones de Wurstquelle se encuentran en el municipio de La Orotava. Sus máximos directivos y accionistas son el presidente Michael Zimmermann, el consejero delegado Werner Markus Ludwing y el vocal Marco Schafft. Los tres forman parte del consejo de administración que ha regido Wurstquelle desde 2008 hasta hoy.
55 años en las islas
Esta firma cárnica empleaba a 24 trabajadores. El pasado 8 de noviembre se declaró en suspensión de pagos, con una deuda de 300.000 euros, tal como informó Atlántico Hoy.
En 2020, en plena pandemia, con sus secuelas de confinamiento y restricciones, las ventas de Wurstquelle se derrumbaron un 55% y las pérdidas subieron a 170.000 euros.
La entidad se constituyó en 1967, por iniciativa de varios ciudadanos alemanes. Desde los inicios se dedicó a producir elaborados cárnicos destinados a la nutrida colonia germana afincada en las Islas Canarias. El surtido de recetas incluía salchichas, fiambres, hamburguesas, jamones y panceta.