Las armerías de Canarias podrían quedarse en el medio plazo sin stock de armas de fuego después de que Seur, única empresa de envíos que trabajaba con este tipo de mercancía en las Islas, haya dejado de prestar el servicio de transporte de armamento.
Así lo denuncian las propias armerías. Atlántico Hoy ha hablado con la propietaria de uno de estos establecimientos en Tenerife, que ha explicado que no están recibiendo mercancía desde el 1 de enero.
Seur deja de transportar armas
Seur, por su parte, ha confirmado a este medio que ha dejado de transportar armas y, aunque no ha detallado las razones, desde el sector de las armerías apuntan a un endurecimiento de los controles y requerimientos que ha hecho a la empresa de envíos descartar el transporte de estas mercancías.
Dado que no hay ahora mismo ninguna otra compañía que realice estos envíos, una vez se acaben las existencias dejará de haber armas de fuego a la venta, explica la propietaria de esta armería tinerfeña, salvo que aparezca otra empresa que realice esta función.
¿Cómo adquirirlas?
Esta situación ha provocado un enorme contratiempo para los sectores civiles que se dedican a actividades relacionadas con las armas. En primer lugar, como es lógico, para las armerías que ven sustancialmente menguada su capacidad de negocio. Por otra parte, los cazadores (aproximadamente 15.000 en todo el Archipiélago) y los federados en deportes de tiro (entre 2.500 y 3.000, aproximadamente) van a sufrir los perjuicios de la situación si tienen que renovar su arsenal.
Actualmente, según explica a Atlántico Hoy Juan Borges, presidente de la Federación Insular de Tiro Olímpico de Tenerife, los tiradores están teniendo que ir personalmente a la Península a adquirir sus armas, con el inconveniente económico y de tiempo que acarrea.
Al billete de avión del tirador hay que añadir el billete del arma por ser una mercancía especial, que está fijado en 90 euros, así como la gestión burocrática al regresar a Canarias de pagar el IGIC del producto y reclamar el IVA de vuelta al haberlo compado fuera de las Islas. Todo sumado a gastos de transporte y alojamiento en el lugar de destino para adquirir el arma.
La munición
Una cuestión aparte es la munición para su venta -es decir, cuando no va ligada a un arma concreta, en cuyo caso el porte se explica en el siguiente epígrafe-. Actualmente, las balas se están trayendo por vía marítima a través de una naviera que opera desde el puerto de Alicante (Comunidad Valenciana).
No obstante, el endurecimiento también de las condiciones de transporte de munición, ligado al nivel de seguridad de los contenedores que traen esas balas, está provocando en el sector un creciente temor porque esta naviera, al igual que hizo en diciembre Seur con las armas, decida dejar de transportar cartuchos.
La normativa
Hasta ahora, Seur hacía envíos con la munición y las armas del mismo calibre en transportes separados y con la guía de circulación de armas vigente. El envío y la recepción debía hacerse, además, en la Intervención de Armas de la Guardia Civil.
El reglamento de armas vigente recoge que los envíos superiores a 25 armas cortas o 50 armas largas deben realizarse obligatoriamente a través de empresas de seguridad. En Canarias, la guía de circulación de armas se debe remitir a la Intervención de Armas del puerto o aeropuerto de embarque y, una vez que surta efectos en la misma, se enviará a la del lugar de destino.