Más de 300.000 vehículos en Canarias superan los 15 años de antigüedad. El dato, ofrecido por la patronal del automóvil en el Archipiélago, deja en evidencia que la comunidad autónoma cuenta con un parque móvil desfasado ante una emergencia climática que obliga a establecer zonas de bajas emisiones en muchas ciudades españolas.
Manuel Sánchez, presidente de Faconauto en las Islas, asegura en declaraciones a Atlántico Hoy que la cifra corresponde a más del 40% de todos los coches y motocicletas de particulares que circulan cada día por las carreteras canarias. Uno de los principales problemas a los que se enfrentan los propietarios es que no tienen la capacidad de poner la etiqueta eco que ya se ha empezado a pedir en ciudades como Madrid o Barcelona.
"Se les dio los datos"
La patronal lamentó el pasado 2 de enero, a través de un comunicado, que no se haya podido establecer un acuerdo con el Gobierno regional para implantar incentivos que faciliten la compra de vehículos por parte de las familias en el Archipiélago. “Se les dio todos los datos, se preparó la estrategia y hace una semana la directora general de transportes [María Fernández] nos comunicó que no lo metían en el presupuesto”, explica.
Sánchez apuesta por un plan de achatarramiento que haga más accesible a los canarios con rentas más bajas adquirir un coche de bajas emisiones. Todo mediante un tope de precios. “Se deben quitar vehículos que son peligrosos, ya no por las emisiones solo, sino también por la seguridad”, subraya. “Es para ayudar a las personas que más lo necesitan”, añade.
Las rentas
“La seguridad de un coche de hace 15 o 20 años”, dice, “no tiene nada que ver con la de uno actual”. Añade que “cuando se ven los informes de accidentes, en la mayoría de los casos cuando hay fallecidos el vehículo tiene ya una cierta edad”.
El presidente de Faconauto Canarias defiende el plan de incentivos para la compra de coches por parte de las personas con rentas más bajas porque las comunidades que lo han aplicado “han crecido”. Considera que se le está dando la espalda a la población, dado que tiene un parque móvil “muy envejecido”.
Pacto de Las Flores
“Parece ser que queremos ser líderes en todas estas cuestiones de bajar las emisiones pero después no estamos apoyando como en otras regiones”, exclama Sánchez. Indica que comenzaron a hablar del tema con el Gobierno de Canarias en el año 2019 —con Ángel Víctor como presidente en el Pacto de Las Flores—, pero el volcán de La Palma y la pandemia dejaron el asunto en un cajón. “Quedó en nada”, afirma.
Aunque al final no ha sido posible para 2025, el plan se retomó con el nuevo gobierno liderado por Fernando Clavijo. “Tanto el consejero Mariano Hernández Zapata —de Transición Ecológica— como Pablo Rodríguez —de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad— nos dijeron que había que ponerlo en marcha, que era una necesidad”, expresa.
Falta de infraestructura
“Tenemos el Plan Moves 3, pero no vale para todas las familias porque un vehículo eléctrico tiene un coste un tanto superior y además no todo el mundo por las circunstancias de la vivienda o por la falta de infraestructura para la recarga pública, no todo el mundo puede acceder a ese vehículo”, prosigue.
Asevera que, a pesar de que el Archipiélago bate récords en la llegada de turistas, “la renta per cápita y la economía de los canarios sigue siendo un tanto discutible con respecto a otras regiones de España”. “Lo que pedimos es que a esas familias las ayudemos con vehículos, en algunos casos híbridos o en otros eléctricos”, apostilla.
Las ayudas
“La base de todo esto está en que hemos mirado para otro lado. Tenemos una comunicación política donde siempre se está diciendo que la culpa es del otro y esto ha estado en nuestras manos. Las Islas, lamentablemente, no tienen la infraestructura de transporte público que hay en otros sitios”, reflexiona Sánchez.
Las ayudas que plantea suelen oscilar entre los 1.500 euros y los 2.000 donde una parte la pone el distribuidor. Además, destaca que cuando se habla de que Canarias quema muchísimo fuel, mucha gasolina, comparado con la población se debe tener en cuenta un detalle: mientras más antiguo es el coche, más consume.
“Nos hemos acostumbrado a vivir en el silencio y en la sumisión absoluta. Hay que levantar la voz. No podemos tener 18 millones de turistas, ser un referente mundial y que vivamos en unas condiciones cuestionables”, culmina.