Solo el 6,12% de los canarios podrían hacer frente a sus gastos corrientes sin tener que pedir prestado o cambiar de casa durante más de una semana y menos de un mes si dejara de recibir la principal fuente de ingresos del hogar. Los datos han sido extraídos del Banco de España que, en su Encuesta de Competencias Financieras (ECF), tiene un apartado que se describe como “vulnerabilidad económica” —con datos del año 2021—. En este expone el porcentaje de individuos que podrían vivir su vida con normalidad gracias a sus ahorros si perdieran, por ejemplo, su empleo —estudia desde una semana hasta los seis meses—.
Asimismo, en el mismo apartado se puede visualizar que el 45,27% de la población de las islas utilizaron ahorros entre aquellos cuyos gastos fueron mayores que sus ingresos en los últimos doce meses.
Acumular riqueza
Por si fuera poco, el mismo Banco de España ha advertido de que los jóvenes tienen ahora menos capacidad para acumular riqueza lo que deja a este sector de la población en una situación más vulnerable ante futuras perturbaciones económicas. La Encuesta Financiera de las Familias, publicada recientemente, revela un análisis detallado sobre la evolución del patrimonio de los hogares a lo largo de más de dos décadas.
Este permite examinar cómo ha variado el patrimonio neto de los hogares según la edad del cabeza de familia una vez que se han descontado las deudas. Se observa que en el caso de los hogares con un cabeza de familia menor de 35 años, su riqueza neta ha experimentado una disminución en comparación con la misma franja de edad dos años atrás. Según los datos ajustados a euros del año 2022, esta caída es significativa, pasando de los 27.000 euros registrados en 2020 a los 20.000 euros en 2022, lo que representa un retroceso del 26%. Por otro lado, durante el mismo período, se ha observado un ligero incremento en el patrimonio para los hogares con jefes de familia mayores de 55 años, mientras que se ha mantenido prácticamente estable para el grupo de edad comprendido entre los 35 y los 55 años.
Patrimonio neto: cero
Poder acumular riqueza es un hecho cada vez más lejano para las generaciones jóvenes porque a los 30 años la mediana del patrimonio neto se encuentra prácticamente en cero. Y es que, por un lado, los jóvenes enfrentan dificultades para obtener préstamos hipotecarios, lo que limita su capacidad de inversión en bienes raíces y, consecuentemente, su capacidad de beneficiarse de su apreciación.
Además, el aumento de los precios de la vivienda dificulta aún más el acceso a la propiedad. Por otro lado, los ingresos de los grupos demográficos menores de 44 años han experimentado una disminución ajustada por inflación entre 2019 y 2021, lo que dificulta aún más la capacidad de ahorro. En contraste, los ingresos han aumentado en todos los grupos de edad a partir de los 45 años.