Aunque diferentes índices dan datos diversos sobre el número de horas que trabajan los empleados de Canarias, las cifras que ha estado trabajando desde Comisiones Obreras calculan que 6 de cada 10 trabajadores del sector privado en Canarias trabajan 40 horas semanales, por lo que se verían beneficiados directamente de la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas que han pactado PSOE y Sumar para conformar un gobierno.
El número de horas trabajadas se acuerda a través de las negociaciones entre los empresarios y los trabajadores, por lo que cada convenio tiene diferentes horarios. Según asegura Inocencio González, secretario general de CCOO en Canarias, los informes que manejan, con datos de la Encuesta de Población Activa y otros índices, reflejan que la medida puede llegar al 60% de los trabajadores del sector privado.
Altas horas trabajadas
“De hecho somos la comunidad autónoma, con 1.798 horas, donde más horas trabajamos al año”, asegura González. Los últimos datos sobre el tiempo de trabajo por trabajador y mes del Instituto Nacional de Estadística relativos al segundo trimestre de 2023 sitúa a las islas como la tercera comunidad con más horas trabajadas, aunque las cifras van variando según las fuentes.
El indicador del INE analiza las horas trabajadas en la construcción, la industria y el sector servicios. Según sus datos la media de horas efectivas en Canarias en el segundo trimestre estuvieron entre las 35,9 horas semanales del sector servicio y las 37,15 de la construcción. Sin embargo, González asegura que estos datos pueden estar distorsionados por no tener en cuenta variables como la mediana o los subgrupos donde menos o más se trabajan.
Más allá del convenio
Además, destaca que en el ámbito laboral se da otra casuística que son las horas que no se computan, es decir, de trabajadores que han denunciado trabajar más horas de las que los convenios establecen, hecho, que como traslada se da especialmente en las jornadas parciales. “Es un fraude en toda regla”, critica al respecto.
Las patronales ya se han mostrado en contra de esta propuesta. Desde CEOE, CEPYME y ATA han emitido un comunicado criticando la medida porque va a generar “un impacto negativo para la actividad de las empresas”. En la misma línea, el presidente de la patronal hotelera Ashotel, Jorge Marichal, ha señalado en Canarias Radio que “a priori no parece que nos vaya a afectar de manera positiva” pero “tenemos que afilar el lápiz a ver cómo nos va a afectar”, especialmente en relación al servicio de 24 horas de los hoteles.
Hacia las 32 horas
Una posición que rechaza abiertamente el secretario de organización de UGT Héctor Fajardo quien señala que la negativa de las patronales se basa “en el mismo discurso” de cuando se impuso la jornada de 40 horas semanales, hace 40 años. Desde su punto de vista las herramientas de digitalización y automatización que se manejan actualmente hacen posible la reducción de la jornada laboral.
Pero Fajardo es aún más ambicioso y se marca como reto imponer las 32 horas semanales a nivel general. Según destaca esta jornada ya se ha implantado de forma piloto para ver cómo ha afectado a la productividad y asegura que “se ha demostrado que la productividad no solo no baja o se mantiene o aumenta”.
Según la Encuesta de Población Activa, a nivel nacional los hombres trabajaron 38,6 horas semanales de media y las mujeres 33,8 horas. La propuesta de reducir la jornada laboral se impondrá de forma paulatina, primero serán 38,5 horas en 2024 y luego 37,5 horas en 2025. Tanto Fajardo como González celebran la iniciativa por cómo afectará a la salud de los trabajadores y a la capacidad para conciliar su vida labora y personal, aunque desde CCOO avisan que es solo un acuerdo supeditado a la posibilidad de formar gobierno.