El próximo 30 de marzo finaliza el periodo que tenían las empresas para adaptarse a la Reforma Laboral que entró en vigor el último día del pasado año regulación.
El abogado Carlos Pinilla, socio responsable del departamento laboral de Garrigues en Canarias, entiende que una de las reflexiones que hay que hacerse en este punto con respecto a la Reforma Laboral es que es “un aviso a la temporalidad en el sector público más que en el privado”.
El experto laboralista cree que en las administraciones públicas se concentra gran parte de la temporalidad, y puso como ejemplo el sector sanitario, donde los trabajadores pueden “estar encadenando contratos temporales” durante un tiempo indeterminado.
El socio de Garrigues opina que esta ley es "la respuesta que da el Gobierno a la petición que hace Bruselas de acabar con la temporalidad”.
Sin embargo considera que el problema con esta norma es que “muchas cosas no han quedado claras y habrá que esperar a que los tribunales lo interpreten”.
Contrato fijo-discontinuo
Uno de los aspectos que el abogado llamó a tener en cuenta fue la figura del nuevo contrato fijo-discontinuo, que permite al empleado ser miembro de la empresa aunque desarrolle su actividad solo en unos periodos determinados.
Se simplifica la contratación pero se deberá justificar en todo momento cuando desarrolla su labor el trabajador, no pudiendo contratar la empresa sin justificación un máximo de 90 días.
Tenerife Network
El jurista ha sido el invitado de honor en el almuerzo quincenal del círculo de empresarios Tenerife Network, presidido por Juan Barrientos, para ahondar en las perspectivas que augura la nueva ley.
En el encuentro celebrado en el Royal River Luxury Hotel Pinilla ha apuntado que “lo que no se consiga con los convenios sectoriales no lo va a conseguir la norma”, entendiendo que es necesario el acuerdo entre patronal y sindicatos para que la nueva legislación tenga el efecto deseado.