La pandemia afectó a muchos sectores comerciales, entre ellos la industria de lujo, que ahora, tras todo el parón global, ha vuelto a crecer. El sector de alta gama en España movió 17.700 millones de euros en 2022, el 4,5% de la facturación en Europa y el 1% mundial, según datos recientes del Círculo Fortuny con el análisis de McKinsey & Company.
A las puertas de Navidad, las principales compañías del sector de la joyería y relojería afrontan una campaña clave en ventas, sobre todo gracias a la demanda local, aunque el turismo internacional también ha supuesto un incremento de los ingresos del mercado de alta joyería de España.
Tiendas de lujo
Entre los principales exponentes de esta propuesta premium figuran marcas con una larga trayectoria, como Cartier, Rabat, Bulgari o Rolex, entre otros. Sus establecimientos boutique en las arterias comerciales de Madrid y Barcelona ofrecen un universo con sus marcas propias y de terceros.
En la avenida de lujo de la capital catalana han preparado esta campaña compañías de tradición joyera, como es Rabat. Desde su flagship, un edificio modernista de seis plantas junto a La Pedrera, la empresa se distingue por una estrategia de excelencia y fidelización del cliente nacional que busca personalización en joyas o relojería de grandes marcas.
Arte y artesanía
Este otoño, Bulgari ha experimentado un período destacado, esforzándose por cautivar a un público que busca valores y experiencia. La casa romana celebró el 75 aniversario de su icónica colección Serpenti con una exposición en su boutique de Barcelona. De manera similar, Cartier ha fusionado arte y artesanía en su renovada boutique catalana.
Este universo de alta joyería en España incluye veteranas como Bagués Masriera, Pere Quera, Carrera y Carrera, junto a nombres contemporáneos como Tous y Suárez, que recientemente celebró 80 años.