Wolfgang Kiessling, el fundador y propietario de Loro Parque –empresa que aparte de gestionar el conocido zoológico también ocupa el acuario Poema del Mar y el parque acuático Siam Park–, ha grabado un vídeo en un tono muy reivindicativo donde expresa su malestar con los movimientos ecologistas, las críticas hacia la forma de cuidar a los animales en su compañía o con algunas informaciones que considera falsas.
Loro Parque lo publicó en la red social X –antes Twitter– el pasado 12 de abril. El empresario basa su discurso en defender que no es posible a día de hoy mantener a las orcas y delfines en mejor estado que en su entidad. “Los tan mencionados santuarios no existen”, afirma. Por lo tanto, el alemán solo ve dos opciones factibles para los animales que buscan un hogar: “Una instalación diseñada por humanos como la nuestra o la eutanasia como último recurso”.
Delfines de Barcelona
“Solo piensen en la morsa Freya, en agosto de 2022, en Noruega. Se sentía muy cómoda cerca de los humanos y disfrutaba estar cerca de los barcos en el puerto hasta que se convirtió en una molestia y las autoridades simplemente la mataron”, manifiesta.
“Otro ejemplo son los delfines de Barcelona, que ahora están en Attika Park en Grecia, nadando en tanques similares a los que tenían en Barcelona. El acuario de Baltimore pasó 10 años buscando un santuario para sus delfines, abandonaron la búsqueda y se quedaron con los animales”, continúa.
"Atacados durante años"
Protesta porque, dice, han sido atacados “durante años” por el cuidado de los mamíferos acuáticos. “Hay seis orcas en Europa, de las que cinco han nacido bajo cuidado humano, y una, Morgan, fue rescatada del mar para salvar su vida”, manifiesta.
Kiessling declara que dos de ellas vivían en una instalación, ahora cerrada, de Marineland Antibes en Francia, y las autoridades trabajan en encontrar una solución para el futuro de estos animales, mientras que cuatro orcas viven en el Loro Parque.
Opina que será difícil obtener permisos de cualquier país costero para construir un santuario debido a razones médicas y biológicas, ya que sería demasiado peligroso. “Hay problemas de seguridad, infraestructura como cámaras frigoríficas, alojamiento, clínicas, limpieza, accesibilidad y sobre todo, financiación”, relata.
Islandia
Expone que en Islandia hay una jaula de red, pero que no es más grande que los tanques donde alberga Loro Parque a sus orcas y delfines. En el país europeo alojan a dos belugas que durante los meses de invierno se trasladan a un tanque protegido dentro de un edificio, “aún más pequeño que la jaula de red”.
Con ánimo de terminar con otro tema que considera un bulo, pone sobre la mesa que “las orcas no nadan 100 millas todos los días”. “Lo normal es que sea de siete a 10 kilómetros, pero en busca de nuevas fuentes de alimento u oportunidades de apareamiento. En cautiverio deben estar activas y tienen que gastar energía equivalente a 10 millas diarias. Logramos esto a través de un entrenamiento constante y el punto culminante son nuestras exhibiciones”, asevera el empresario.
"No son actos de circo"
No pierde la oportunidad de decir que durante más de una década han mostrado exclusivamente movimientos naturales de las orcas y delfines, tal como se ven en la naturaleza. “No son actos de circo, son lecciones de aprendizaje”, sostiene.
“Nuestros animales se mantienen en las mejores condiciones, reciben el amor de sus cuidadores, una dieta equilibrada específicamente diseñada para cada animal, atención médica las 24 horas, controles diarios del agua en la que viven y, por lo tanto, llevan una vida protegida”, añade a su reflexión.
"Los animales están satisfechos"
Todo eso lo lleva a suponer que los animales “están satisfechos con su vida” porque “el sufrimiento tan proclamado asociado con pequeños tanques y aburrimiento aún no ha sido científicamente confirmado por ningún grupo de expertos”. “Es interesante saber que en Europa hay 260 delfines, de los que el 80% ha nacido bajo cuidado humano”, agrega.
Además, hace referencia a una industria –todo apunta que se dirige a los grupos ecologistas– “que se enriquece atacando especialmente a empresas industriales destacadas mediante difamaciones, mentiras, escenarios inexistentes y daño a la reputación, dificultando la vida”.
“Influyen nuestras vidas según sus ideas. Quieren que todos vivamos como veganos, que no consumamos lácteos, que no tengamos mascotas, que no usemos bolsos y zapatos de cuero. Y ahora también quieren influir en nuestros días de vacaciones para que no visitemos zoológicos”, cuenta.