El ingeniero aeronáutico Raúl Llamas, miembro del departamento de proyectos futuros de Airbus, cree que en Canarias se dan las condiciones idóneas para el desarrollo del hidrógeno líquido como combustible.
Así lo ha afirmado durante su intervención en el Ciclo Movilidad, Transporte y Descarbonización, organizado por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife.
Llamas opina que el hidrógeno “hay que producirlo donde se den la condiciones y en Canarias se dan”, con una situación geográfica “en la que la energía viene del sol y del viento, que son las fuentes de energía limpia que más van a crecer en los próximos años”.
Necesidad del transporte aéreo
El ingeniero recordó que Canarias, al ser una región ultraperiférica, ve en el transporte aéreo “una necesidad económica y social" y por ello desde el archipiélago hay rutas a la mayor parte de Europa e incluso al continente americano.
En su opinión, además de la situación geopolítica, en las Islas hay otras condiciones para que sea una región que contribuya a la evolución de la aeronáutica. “En Canarias se ha hecho investigación aeronáutica y mucha gente no es consciente. El Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) tiene un túnel de viento, en el que se han realizado estudios de aerodinámica experimental y un superordenador en el que se han hecho cálculos aerodinámicos computacionales”, por lo que aseguró que “solo falta el compromiso y las ganas de empujar. Aquí se puede hacer esta investigación”.
Proyecto ZEROe
Según Llamas, la compañía Airbus aspira a ser líder en la transición de la descarbonización del transporte aéreo y “tiene como primer objetivo construir el primer avión del mundo con cero emisiones en el año 2035” a través del proyecto ZEROe.
Un proyecto que trabaja también en mejorar la aerodinámica, la eficiencia en la producción o las infraestructuras aeroportuarias. Para esto último, según el ponente, “lo esencial es que éstas permitan que se pueda utilizar hidrógeno, que tiene restricciones complejas de almacenamiento”.
ZEROe está estudiando tres configuraciones, una de ellas “muy relevante para Canarias”. Un tubo hélice para menos de 100 pasajeros que utilizará el hidrógeno líquido como combustible directamente quemado en las turbinas o usará células de combustible alimentadas por hidrógeno para generar electricidad. “Pero hay más opciones y se están estudiando muchas posibilidades”.