Canarias ha logrado en menos de una década lo que muchos creían imposible: crear desde cero un ecosistema de animación competitivo a nivel global, similar a ciudades como Vancouver o Montreal.
Lo que comenzó como una apuesta arriesgada en 2016, hoy genera más de 1.500 empleos directos y produce contenido para gigantes de la industria como Netflix, Disney, Warner, y Apple, gracias principalmente a los incentivos fiscales de la Zona Especial Canaria (ZEC) y la colaboración con centros de formación locales.
World Animation Summit
Este noviembre la animación canaria es protagonista en el World Animation Summit, uno de los eventos más prestigiosos de la industria, celebrado en Hollywood.
Este reconocimiento internacional confirma que Canarias es un caso de éxito en la creación de un hub de animación. Al evento asistieron representantes de Warner Bros Animation, Nickelodeon y Dreamworks, entre otros, quienes elogiaron el modelo de Canarias y la calidad de sus producciones.
El presidente de la ZEC, Pablo Hernández, comentó que representantes de otras regiones que han intentado impulsar sus propias industrias de animación miraban con incredulidad los logros de Canarias.
Según Damián Perea, director del festival Animayo, el único festival español que califica para los premios Óscar, la calidad de las presentaciones de Canarias impresionó incluso a los más experimentados de Hollywood.
La Competitividad de Canarias
Durante una mesa redonda en el evento, líderes de estudios de animación en Canarias hablaron sobre las ventajas que las islas ofrecen para afrontar los desafíos globales de la industria.
Dirk Hampel, CEO de B-water, señaló que la calidad de vida en Canarias favorece la creatividad y retención de talento, mientras que Darío Sánchez de 3 Doubles resaltó cómo el entorno natural de las islas permite un balance entre trabajo y vida personal que potencia la productividad.
Además, la colaboración con instituciones locales ha permitido desarrollar una cantera de talento local que ya es mayoritaria en algunas empresas.
Lorna Withrington, de Gigglebug, explicó que decidieron instalarse en Canarias para adaptarse mejor a las demandas del mercado, priorizando el talento y la calidad.
Lea Laurien, de Fortiche, agregó que la calidad de vida y el entorno multilingüe de las islas también fueron factores clave en la decisión de establecerse en Canarias.
Futuro y expansión
El éxito de la industria de animación en Canarias es un ejemplo de cómo diversificar y crear sectores de alta tecnología en un tiempo récord.
Hernández apuntó que el modelo de Canarias podría replicarse en otras industrias, como la de los videojuegos, el sector aeroespacial o la producción de semiconductores, y que ya están trabajando en colaboración con PROEXCA y otros actores para llevarlo a cabo.
Canarias ha demostrado que es posible construir una industria sólida y competitiva desde cero, aprovechando el talento, los incentivos fiscales y la infraestructura disponible. Hoy, la animación canaria es un referente mundial, y su crecimiento solo parece estar comenzando.