No poder pagar los créditos de consumo es la principal razón en Canarias para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad. Así lo afirma el despacho de abogados Repara tu Deuda, que lleva en exclusiva litigios relacionados con esta Ley de 2015 y que, según los datos publicados en su página web, atiende el 87% de los casos en España.
Solo en Canarias, el despacho ha representado en 2021 a 2.529 ciudadanos que han necesitado acogerse a esta Ley. Esta cifra supone un incremento del 386% de los casos aceptados por la empresa respecto al año anterior, que se cifró en 520. No es casual, la Ley de Segunda Oportunidad, que ampara a ciudadanos endeudados para ver su deuda condonada, fue aprobada en julio de 2015 y actualizada por última vez en mayo de 2020. Esto implica que no todos los ciudadanos sepan de su existencia y que aun no hayan surgido numerosos despachos dedicados en exclusiva a tramitar estos litigios.
El objetivo de la norma viene implícito en su nombre. Así, el preámbulo de la misma reza que "su objetivo no es otro que permitir lo que tan expresivamente describe su denominación: que una persona física, a pesar de un fracaso económico empresarial o personal, tenga la posibilidad de encarrilar nuevamente su vida e incluso de arriesgarse a nuevas iniciativas, sin tener que arrastrar indefinidamente una losa de deuda que nunca podrá satisfacer".
Principalmente créditos de consumo
En este sentido, Repara tu Deuda ha ocupado una posición de nicho que le permite recibir casi el 90% de las peticiones en España. Según sus cálculos, en Canarias el tipo de deuda que más se repite es aquel generado a través de los créditos de consumo (el 60%), un recurso bancario permite financiar la adquisición de bienes duraderos. Estos se formalizan en un contrato en el que se establecen la cantidad concedida y las cuotas periódicas a pagar, en las que se incluyen los intereses, comisiones y gastos conforme a las condiciones pactadas.
Este tipo de créditos son más fáciles de conseguir que otros de mayor envergadura, como las hipotecas, pero tienen, por lo general, intereses más altos. Tras ellos, las deudas que los canarios han pedido condonar de manera más habitual son las hipotecas (30%), y los micro créditos (10%).
No obstante, la Ley no ampara a cualquier persona. Para poder acogerse a ella, el deudor debe completar unos requisitos previstos en la norma. Es imprescindible que el solicitante no haya sido condenado por delitos contra la Hacienda Pública, la Seguridad Social, derechos de los trabajadores, patrimonio o haya incurrido en un delito de falsedad documental. En cualquier caso, esta circunstancia solo aplicaría de haberse producido en los últimos diez años y ser sentencia firme. De lo contrario, el solicitante sí estaría amparado.
Buena fe
Por otra parte, el interesado debe actuar de buena fe. Esto implica que este haya intentado llegar a un acuerdo extrajudicial previamente con la entidad prestamista y que no haya rechazado un puesto de trabajo los últimos 4 años. También que comunicará de inmediato en caso de recibir una gran cantidad de dinero de forma inesperada, como una herencia. Además, este recurso no es infinito. El deudor no podrá haberse acogido a dicha Ley en los 10 años anteriores a la petición.
Por último, los requisitos establecen que el deudor hubiese satisfecho antes todo crédito contra la masa (deudas generadas durante el proceso legal) y privilegiados (generalmente, los que vinculan algún bien del deudor como garantía), y pagado el 25% de sus créditos, o al menos que se demuestre que se intentaron pagar.
Canarios exonerados
El monto de deudas que este despacho de abogados ha conseguido que se condonen para sus representados asciende, en 2022, a más de 68 millones de euros. Uno de los casos de 2021, según recogió en su momento Europa Press, ocurrió en Santa Cruz de Tenerife, cuando el Juzgado de Primera Instancia nº9 concedió a David Ángel (nombre ficticio) el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI) por una deuda que ascendía a 61.435 euros.
El exonerado había intentado cubrir su deuda con otro préstamo tras meses sin poder afrontar el pago, estando su pareja en paro y sin contraprestación por desempleo y teniendo que cuidar de un menor a su cargo. La situación llevó a la familia a ir pidiendo micro créditos y tratar de renegociar sin éxito su deuda.
Otro canario que vio también perdonada su deuda fue Alberto Muñoz (nombre ficticio), en Las Palmas de Gran Canaria, que en diciembre de 2021 logró que el Juzgado de Primera Instancia nº10 le concediese el BEPI por una cantidad de 58.435 euros de la que debía hacerse cargo tras divorciarse.