El 2 de diciembre de 2021 el Consejo Insular de Aguas de La Palma tomó la importante decisión de declarar la reversión de la central hidroeléctrica Salto del Mulato, que Endesa había estado explotando las últimas décadas, obligando a la empresa a ceder en perfecto estado los terrenos y la infraestructura que llevaban en desuso desde hace casi dos décadas. Tras el fallo del Consejo Endesa presentó un recurso administrativo fuera de plazo defendiendo que en ese caso el Cabildo debía indemnizar a la energética, algo que para la corporación local no tiene ningún recorrido, aunque da pie a una posible judicialización del caso.
Para el consejero de Energía del Cabildo de La Palma, Carlos Cabrera, la posibilidad de acudir a los juzgados es remota y “no tiene sentido”. Él no le prestó atención al escrito de la energética porque se presentó fuera del plazo establecido para los recursos, pero explica que las alegaciones de Endesa siempre se habían basado en que no cabe la reversión de los bienes dado que los terrenos serían privados y no están de afecto. En ese caso, al haber finalizado la concesión (de 99 años) para la explotación del salto del agua la empresa se ve obligada a ceder la central, pero sería el Cabildo quien debía indemnizarle a ella.
Una central en manos de todos
Un informe de Patrimonio del Cabildo fue el que puso luz sobre todo el asunto y permitió que el Consejo tomara la decisión en diciembre. En él se demostraba que los terrenos los compró una empresa pública del Cabildo, por lo que por ley estaría obligada a revertir los bienes que estaban en dominio público. Así el acuerdo considera que Endesa debe entregar la central hidroeléctrica en perfecto estado para considerar la explotación de la misma, es decir, que las condiciones en las que la empresa entregue la infraestructura no sean un impedimento para su puesta en marcha.
Prácticamente el debate, si es que lo hay, se centraría en la titularidad de los bienes. Preguntada por Atlántico Hoy, desde la comunicación de Endesa en Canarias no han querido aclarar si está dispuesta a llevar a juicio la reversión de los bienes y se limitan a informar que es un tema que se lleva desde Madrid.
Una ola de reversiones
Alexis Martín Hernández es integrante del Grupo de Acción del Salto del Mulato, la organización que ayudó a encontrar el documento de la titularidad que dio pie a la reversión de los bienes. Según teoriza, a Endesa, en realidad, no le interesaría que esta decisión de entregar la central en buen estado siente un precedente. “En esa época (1913) se iniciaron muchísimas concesiones y ahora van a ir cayendo muchas”, comenta. En efecto, un informe elaborado por el Observatorio Sostenibilidad publicado en 2018 reflejaba que en los próximos 10 años caducará la concesión de 45 centrales, dos en Canarias, que revertirán al Estado, y se estima que son unas 800 las que en las próximas décadas finalicen su permiso.
Con la decisión del Consejo, Endesa se ve obligada a acondicionar algunas partes de la central como la tubería por donde baja el agua, según explica Hernández, quien aclara que la infraestructura está en buenas condiciones y que quizás se podría cambiar la turbina para actualizarla. Pero su percepción es que Endesa no lo va a mejorar, como dice la ley, y que finalmente la administración se tendrá que hacer cargo de las actuaciones y traspasar los costes a la energética.
Puesta en funcionamiento
Aparte de la cuestión de si Endesa entregará los bienes en buen estado o recurrirá a los juzgados está la duda de si actualmente se puede explotar la central del Salto del Multado para la generación y almacenamiento de energía. El consejero ha informado de que actualmente se está a la espera de que se remita un informe técnico que aclare si hay viabilidad de explotar la central.
“El problema que tenemos ahora mismo para esta viabilidad es que cuando se le dio la concesión en 1913 el salto era de más de 500 metros y corrían 101 litros por segundo, ahora estamos en 60 litros por segundo”, explica Cabrera. Claramente la disminución del caudal dificulta la explotación, por lo que se ha planteado incrementar el salto y pasar de 500 a 900 metros, “pero en todo caso eso lo tiene que decir el estudio de viabilidad de esa explotación”, comenta el consejero quien explica que se prevé que los resultados del estudio se conozcan este verano.
Hasta que el informe no se publique no se sabrá si finalmente se podrá usar la central para la generación y almacenamiento energético. La intención del Cabildo, según explica el consejero es la ponerla en funcionamiento, “pero no podemos decir que bajo cualquier circunstancia, vamos a esperar al estudio de viabilidad”. Por su parte, Hernández explica que pese a que la generación eléctrica del Salto del Mulato no sea tan grande para el abastecimiento de varios núcleos poblacionales de la Isla, es de interés “porque puede servir de almacenamiento y es constante, da estabilidad al sistema” destaca.
Tanto el miembro del grupo de acción como el consejero aseguran que el recurso presentado fuera de tiempo de Endesa no se sostiene y consideran que la decisión del Consejo Insular de Aguas es firme y la empresa debe entregar la infraestructura en buenas condiciones.