Las perspectivas para la economía canaria durante este año 2023 siguen dominadas por la incertidumbre marcada por la inflación. “Es un año que nos invita al optimismo pero lo anterior también nos invita a la prudencia”, afirma Pedro Ortega, presidente de la Confederación Canaria de Empresarios. “Pueden venir curvas y hay que prestar mucha atención a la economía igual que prestamos atención al coche cuando vamos por una carretera con curvas”. La carretera tiene un final, sin duda, “y la sociedad y las empresas están preparadas para afrontar esta situación y superarla”.
La realidad es que la tasa interanual de inflación subió medio punto de enero a febrero en Canarias, pasando del 6,5% al 6,8% y se convirtió en la segunda más alta de todo el país. Es más, en estos momentos Canarias tiene una tasa de inflación casi un punto mayor que la del resto del país —que es del 6%—.
Inflación subyacente
“La inflación subyacente sigue siendo alta y es la que nos está marcando el ritmo de la política económica en este momento. Es un problema grave que hay que resolver porque pensábamos que se podía suavizar y no ha sido así, al contrario, se ha ido incrementando”, expuso Ortega. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revisado una décima a la baja los datos adelantados el pasado 28 de febrero, tanto la tasa general, hasta el 6%, como la subyacente —índice sin alimentos frescos ni productos energéticos—, hasta el 7,6%, y en este último caso es una décima más que la registrada en enero y la más alta desde diciembre de 1986.
Respecto a la tasa mensual, el IPC general sube un 0,9% en febrero respecto a enero. Lo que más subió fueron los paquetes turísticos nacionales (13%), la electricidad (12,6%) y los alimentos para bebé (11,4%), mientras que lo que más bajó fue el transporte combinado de pasajeros, un 19,7%, y el transporte en guagua, un 7,4%.
Consenso
Con respecto a las relaciones entre el Gobierno de Canarias y la patronal, Ortega defiende que ha habido un diálogo continuo. “Hemos trabajado y hemos estado alineados porque la confederación se ha puesto a disposición del Ejecutivo”. Lo que la patronal desea es que las elecciones no influyan en el funcionamiento de la administración, sino que se desarrolle “un escenario de gobierno estable, una administración que funcione, que sea ágil, que esté digitalizada y que permita que las empresas y empresarios generen riqueza y empleo”.
Además, en relación a la subida de los salarios, Ortega expone que desde las empresas están cerrando convenios y a nivel nacional hay más de nueve millones de trabajadores que se han visto beneficiados de esta subida. “Lo que pasa es que la subida es algo que tiene que discutir cada empresa con sus trabajadores para conseguir mantener la viabilidad. Porque aquí lo importante es mantener el empleo y generar riqueza y eso se consigue cuando hay acuerdo entre todas las partes”.
Diversificar la economía
“El mundo ya ha cambiado, lo ha hecho tras la pandemia y lo está haciendo en lo digital”, manifiesta Jorge Gutiérrez, socio de Deloitte en Canarias. “Es verdad que en Canarias estamos viviendo como en una burbuja porque hay muchas turbulencias ahí fuera pero en el Archipiélago la cosa va muy bien. Hablas con sectores como el del transporte, el turismo o la construcción y las cosas van muy bien: grandes ocupaciones, volvemos a ver grúas en las ciudades canarias…”. En conclusión, para Gutiérrez hay motivo para el optimismo moderado.
Sin embargo, también asume que no hay que tratar al turismo y a la construcción —los principales motores económicos— como un salvavidas. “Soy un fiel defensor de la diversificación porque en Canarias hay mimbres más que suficientes para que nuestra economía se diversifique”. Las Islas deben, por tanto, apostar por otros sectores como el tecnológico o el audiovisual para seguir avanzando.
La exención verde, una necesidad competitiva
Empresas canarias líderes, como Binter, Astican, Lopesan, Acosta Matos o el Grupo Martínez Abolafio, ven "una necesidad competitiva" que Canarias quede exenta del régimen del comercio de los derechos de emisiones de CO2 y de cualquier tasa asociada a la pretendida descarbonización del continente. Así lo han puesto de manifiesto este martes sus responsables en el encuentro "Impulsando los negocios y los sectores económicos en Canarias", organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección con la colaboración de Deloitte, donde el presidente de Binter, Rodolfo Núñez, ha llegado a decir que las regulaciones ambientales constituyen una de las dos "nubes" que preocupan a la aviación, junto con la capacidad de algunos aeropuertos y la de atraer personal cualificado al sector.
A su juicio, hay que tratar con "prudencia" las cuestiones relacionadas con el impacto climático. Núñez ha recalcado que los derechos de emisión, las tasas verdes y los impuestos al queroseno y los billetes aéreos encarecerán el viaje a cada pasajero que venga a Canarias, comunidad donde "todos a una" tienen que a apelar "por filosofía" a su condición de Región Ultraperiférica para lograr quedar exenta de esa fiscalidad verde.