El Gobierno de Canarias ha anunciado el aumento de los recursos hídricos para el riego agrícola con diez nuevas desaladoras, las cuales no llegarán al Archipiélago hasta dentro de 14 meses.
Por valor 13,4 millones de euros, serán cedidas a los Cabildos insulares de las Islas y se sufragarán con subvenciones a las instituciones insulares así como a través de un encargo al Instituto Tecnológico de Canarias (ITC). En este sentido estiman una capacidad de producción de 22.600 metros cúbicos de agua diarios y de 8,24 millones anuales.
De esta manera según han explicado este martes en rueda de prensa el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Soberanía Alimentaria, Narvay Quintero, se cumple así con una de las principales demandas del sector primario ante las reivindicaciones del pasado mes de febrero que se unen a los problemas actuales que hay en las Islas ante la escasez de agua.
Poco más de un año para fabricarse
En este contexto, Clavijo apuntó que la puesta en marcha de las desaladoras y su posterior cesión a los Cabildos insulares supondrá un “salto cualitativo y cuantitativo”. El presidente explicó que, aunque no se trata de una competencia del Ejecutivo regional, "el problema es grave y el verano será complejo" por lo que "es necesario actuar".
Las desaladoras no estarán disponibles este verano, sino en un año y dos meses. A pesar de que los agricultores han solicitado medidas inmediatas, Narvay Quintero resaltó que la tardanza se debe al proceso de fabricación, que tarda esos 14 meses. "Aún así se está haciendo en un tiempo récord", apuntó el consejero insistiendo en que "los sistemas hídricos no son soluciones de hoy para mañana".
2.500 metros cúbicos al día
Las desaladoras se entregarán a los Consejos Insulares de Aguas, que serán los encargados de su gestión. Se ubicarán así en siete islas y estarán repartidas de la siguiente manera: dos en Gran Canaria, Tenerife y El Hierro respectivamente, así como una en Lanzarote, Fuerteventura, La Gomera y La Palma, sumando un total de 10. Todas tendrán una capacidad de desalación de 2.500 metros cúbicos al día a excepción de El Hierro con 1.300 cada una.
Desde el Gobierno de Canarias explican son plantas de ósmosis inversa de agua de mar, de fácil transporte, y cuyo diseño corresponde al ITC desarrolladas en el marco del proyecto “DESALRO 2.0”. Detallan que son adecuadas para cubrir una situación de emergencia con el menor consumo de energía posible del mercado. Según las cifras que se barajan sobre el consumo de agua en el Archipiélago, en Canarias se usan 60 hectómetros cúbicos de agua, que es un 27% de la demanda de agua de la agricultura. El plátano es el cultivo prioritario en la mayoría de las islas.
Narvay Quintero puntualizó que a esta acción se une otras como la modernización y mejora de regadíos "en las que este año se invertirán 12,7 millones de euros" así como a la convocatoria de subvenciones del Plan Estratégico de la Política Agrícola Común (PEPAC) para inversiones en infraestructuras "de regadío de iniciativa privada dotadas con 1,7 millones y con plazo de solicitud abierto", recordó.