Algunos centros comerciales de la zona de Maspalomas se encuentran en situación de deterioro: El Plaza está precintado por orden del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana; el Kasbah está anticuado; y el Metro está a la espera de que se ejecute su derribo después de que en mayo de 2021, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ordenase tramitar el expediente para declarar en ruinas el recinto, petición que fue anteriormente denegada a los propietarios en el año 2014.
Marco Aurelio Pérez, portavoz del Partido Popular en el Cabildo de Gran Canaria y exalcalde de San Bartolomé de Tirajana, confía en que hay varias soluciones para los centros comerciales, como “construir edificios nuevos con usos diferentes o adaptados a los cánones comerciales de hoy en día”. También propone “la creación de edificios de uso turístico, como por ejemplo hoteles”. “Ahora mismo no se está trabajando, desde que se comience a trabajar empezará a haber frutos. Hay que modificar los planteamientos urbanísticos para que sea rentable en el entorno. Repetir lo mismo es garantía de fracaso”.
Cambio de modelo
Pérez sostiene que el ayuntamiento debe “invertir dinero en estudios y tomar decisiones con certeza”. Explica que el modelo empleado en estos centros comerciales con propietarios que explotaban directamente sus negocios ha dejado de funcionar porque “resta capacidad a la hora de tomar decisiones” y opina que los comuneros de los centros “no están para aventuras empresariales”. Según Pérez, “esos centros comerciales fueron importantes para la economía canaria”, pero en este momento “están llevando a ralentizar la situación. "Hay que reunificar las mayorías y plantear una situación de renovación de la visión arquitectónica”.
El portavoz del PP critica que la imagen de los centros comerciales pueda dañar la economía local. "Las camas turísticas estarán más caras o más baratas en función del entorno. Hay camas en determinadas zonas que, dependiendo de la oferta a su alrededor, pueden aumentar el precio por noche”, y sostiene que “si la oferta comercial o de restauración es positiva, contribuirá a que el destino sea más atractivo". Pérez critica que el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana “no está haciendo nada al respecto”.
Metro, al borde del derribo
La propuesta para el derribo del Centro Comercial Metro se remonta al año 2012, cuando se intentó un acuerdo con los comuneros para tirar el inmueble y levantar uno moderno en su lugar. El Plan de Regeneración de Playa del Inglés calificó negativamente la situación de ese centro, pero no se consiguió llegar un acuerdo con los propietarios, por lo que el estado de Metro sigue en deterioro diez años después. El concejal de Urbanismo, Samuel Henríquez, ya firmó el decreto para la declaración de ruina e instó a los propietarios a vallar y a apuntalar el inmueble como paso previo a su demolición. El coste de las obras ronda los 500.000 euros y la comunidad asegura que no puede asumirlo.
Por su parte, Marco Aurelio Pérez tacha de mentiras los supuestos proyectos de derribo del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana. "Para poder ejecutar una obra de demolición primero hay que tener un proyecto aprobado. La primera falacia que se está diciendo es que se va a derribar si ni siquiera está hecho el proyecto. No tienen intención de demolerlo ni a corto ni a medio plazo. La solución no es encargarlo (el proyecto), es llegar a un acuerdo para ver el futuro de esa parcela estratégica en pleno centro de Playa del Inglés”.
El estado de los centros comerciales también ha provocado las críticas de Unidos por Gran Canaria (UxGC). El partido insularista reclamó la semana pasada la reconstrucción de los centros comerciales de Playa del Inglés y que se les dotase de zonas verdes y ha calificado de "lamentable" la situación que presentan.