En siete años, Canarias ha perdido cerca de 3.400 hectáreas de cultivo, de las cuales más de 1.400 eran de cultivo de la papa. Tenerife es la isla que más superficie de cultivo ha perdido, con un saldo negativo de más de 1.700 hectáreas
Según los datos del Instituto Canario de Estadística (ISTAC) recogidos por Asaga Canarias Asaja, en lo relativo a las papas, las cifras suponen una pérdida de una de cada cuatro hectáreas. Además, ha sucedido con otros cultivos como la viña o el tomate, siendo este último uno de los que más preocupa.
Dentro de lo malo, el aguacate se posicionó como el cultivo que más ha crecido en este periodo, con un crecimiento del 82%, así como la lechuga.
Bajada en las papas
En referencia a los datos de Asaga del periodo 2014-2021 sobre la evolución de la superficie de los principales cultivos en Canarias, se observa que los cultivos que han bajado más cultivos de los que han subido. De hecho, se han perdido casi 3.400 hectáreas en esta horquilla temporal, lo que supone un 8% menos de lo que había en 2014, que eran 42.747 hectáreas.
La superficie de cultivo de papas ha experimentado en este periodo una bajada considerable del 26%, con una pérdida superior a las 1.400 hectáreas, lo que representa una de cada cuatro. La viña también ha perdido 2.275 hectáreas y la superficie para el tomate también se ha reducido de forma alarmante, pasando de más de 4.000 hectáreas antes de 2014 a 1.043 aquel año, y reduciéndose a tan solo 606 en 2021. En total se ha perdido un 42% de superficie.
Reconversión de fincas
El aguacate ha sido el cultivo estrella, ya que se aumentó el 82% la superficie cultivable y se pasó de 1.200 hectáreas a más de 2.000. A este cultivo, en términos de crecimiento, le sigue la lechuga, con un aumento de 626 hectáreas y un 112% más que en 2014. Detrás de este incremento está el éxito de las bolsas de lechuga cortadas y lavadas.
Theo Hernando, secretario general de Asaga, explica a Atlántico Hoy que muchas de las superficies de aguacate y de lechuga, sobre todo de aguacate, son de reconversión de fincas perdidas, como por ejemplo de viñedos o papas que se han pasado al aguacate. Esto ha ocurrido en zonas como La Orotava o Güímar, así como en otras islas.
¿Crece la superficie de cultivo de aguacate, pero hay escasez?
Como se ha puntualizado, la superficie cultivable de aguacate ha crecido el 82% en siete años, aunque actualmente su precio es alto y escasea. Como ya ha publicado Atlántico Hoy, las variedades principales que se cultivan que son el hass y el fuerte, que durante julio y agosto no tienen producción. ‘’El fuerte está cogiendo grosor y el hass es muy pequeño en verano, porque empieza en noviembre. Además, es una fruta que no se conserva bien’’, señala Theo Hernando.
En este sentido, apunta que se tiene que consumir rápido y que no le sienta bien el frio, por lo que no se pueden almacenar. ‘’Lo que se produce en Canarias no es tanto para la población o turistas que hay que cubrir. Además, lo que pasa en julio y agosto es que, entre que no podemos almacenarlo, lo que queda es poco o no tiene muy buena calidad, así que suben los precios. Al final son productos de temporada que se tienen que consumir cuando el árbol da fruto’’, apunta.