El proyecto BIOGREENFINERY que promueve el Instituto Tecnologico de Canarias (ITC) ha superado el trámite ambiental. La comisión autonómica dependiente de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial considera que la infraestructura que se prevé levantar en Santa Lucía de Tirajana "no tiene efectos adversos significativos sobre el medio ambiente".
El ITC intentará avanzar en el concepto de biorefinería. El proyecto consiste "en la instalación de una planta piloto de producción de amoniaco verde mediante energías renovables en condiciones aisladas de la red eléctrica de suministro". Se producirá hidrógeno y nitrógeno en las mismas instalaciones, a partir de energía fotovoltaica y eólica, "para posteriormente, mediante la técnica Haber-Bosch y con los necesarios procesos de compresión y cambio de temperatura para reducir los volúmenes de trabajo, realizar la síntesis del amoniaco", explica el informe de la Comisión Autonómica de Evaluación Ambiental publicado este lunes en el Boletín Oficial de Canarias.
"El fin último del amoniaco es el de servir como base para pruebas de pila de energía verde para transporte marítimo. Inicialmente el ITC probará los resultados de su investigación en una guagua a combustible en base a hidrógeno verde", añade el documento.
Fondos europeos
El proyecto, que tendrá una duración de tres años, recibió a finales de 2021 una subvención 3,2 millones de euros de la Consejería de Economía, Conocimiento y Empleo con cargo a los fondos Next Generation.
Esa financiación europea ha acelerado la evaluación ambiental del proyecto. Primero, porque la subvención establece que el plazo para efectuar la justificación finaliza el 31 de mayo de 2023. Y segundo, porque una de las medidas para acelerar la gestión esos fondos fue la creación de una unidad específica dedicada a los trámites ambientales de los proyectos financiados con los Next Generation.