La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga Canarias Asaja) lamenta que las propuestas de cambio aprobadas por el Consejo de Gobierno de Canarias para modificar el Régimen Específico de Abastecimiento (REA) para lo que resta de este año 2022, así como para el próximo ejercicio 2023, “no sean equilibradas, ni justas y vayan en detrimento del sector ganadero”.
Según informan en un comunicado, se entiende que con los cambios introducidos se vuelve a favorecer a la industria y a la importación de productos como la leche en polvo, en un momento tan sensible como el actual para la ganadería láctea debido al fuerte incremento de los insumos.
Perjuicio para el ganadero local
Con la nueva propuesta, un importador de leche en polvo podrá percibir entre 571 y 735 euros de máximo por tonelada, lo que supone 27 y 35 euros más, respectivamente, que este año. Estas abultadas cuantías quedan muy lejos de lo que percibe un ganadero local que únicamente puede aspirar a una ayuda de 92 euros por tonelada para importar cereales.
Este insumo representa la base principal de la alimentación animal y, por tanto, cuenta con el mayor balance de aprovisionamiento, esto es, 245 millones de kilos anuales procedentes de la UE además de 24,5 millones de kilos con origen en terceros países, señala la nota informativa.
Paja y alfalfa
En cuanto a las partidas de paja y alfalfa, aunque se les ha aplicado un incremento de 58 a 63 euros por tonelada, en el primer caso, y de 69 a 73 euros en el segundo, para la asociación, esta subida de cinco y cuatro euros, respectivamente, resulta “insignificante” comparada con el respaldo económico que soporta a la industria.
Llama la atención a Asaga que en el REA de 2023 la subvención a la importación de azúcar experimente un incremento de un 1000% al pasar de 5 a 50 euros la tonelada. Contará con un presupuesto de 400.000 euros más, por lo que no entiende por qué se aumenta la ayuda a un producto importado que desde organizaciones mundiales como la FAO se recomienda reducir su consumo.
"Sector ignorado"
El secretario general de Asaga Canarias Asaja, Theo Hernando, señala que “el sector se siente ignorado ya que no se han atendiendo nuestras peticiones, además de que se sigue incumpliendo con el objetivo específico del REA que no debe perjudicar el desarrollo de las producciones locales”.
Asaga Canarias Asaja siempre ha defendido que se establezca un tope máximo de ayuda REA de los productos que se importan sin perjuicio de unos sectores sobre otros, como es el caso del ganadero. Este tope debe ajustarse a cubrir los costes adicionales del transporte y almacenamiento por su condición de ultraperificidad que es para lo que está diseñada esta ayuda.
Malestar
Esta organización profesional agraria, indica la nota informativa, también pone de manifiesto su malestar por el modo de proceder y organizar las reuniones que conciernen a asuntos tan importantes como el REA o el POSEI (Programa de Ayuda a las Producciones Agrarias de Canarias) por parte de las administraciones públicas competentes. En dichos encuentros la tónica predominante es la falta de planificación, la improvisación, el desconocimiento sobre las necesidades del sector y no tener en cuenta los informes que Asaga Canarias Asaja presenta en tiempo y forma para negociar estas partidas.
En la misma línea, Asaga Canarias considera negativo que, durante la negociación del REA, solo se haya permitido hacer cambios de balances de aprovisionamientos y ayudas dentro de cada sector, pero no entre los sectores implicados (industrial, importadores y agrario). Esto supondría aprovechar aquellas partidas excedentarias de la industria y la importación para traspasarlas al sector agrario y evitar así que se tengan que devolver a Europa.
POSEI
Por lo que respecta a la propuesta para el POSEI 2023, Asaga Canarias Asaja valora que las dotaciones presupuestarias se incrementen en un 10% a la producción vegetal y un 20% a la producción animal para contribuir a que las explotaciones puedan hacer frente a la inflación y mantener su actividad. Sin embargo, presenta dos objeciones: la primera tiene que ver con el incremento a la ayuda a la hectárea de papa que sube de 950 a 1.110 euros. Aunque a priori, pueda parecer positivo, las compensaciones por cultivar papa en las islas deben destinarse a las producciones de calidad. De esta manera se incentiva, tal y como demanda la Unión Europea, la profesionalización del sector, la trazabilidad del producto, la regulación de la actividad y la comercialización, bien a través de cooperativas u OPFH (organizaciones de productores de frutas y hortalizas), para concentrar la oferta y lograr mejores precios con la distribución.
La otra objeción tiene que ver con los 33,8 millones que, presumiblemente, aportará el Estado por el Posei adicional. Es cierto que la aprobación del REF en 2018 recogía que el Gobierno Central debía destinar por ley, una partida en los Presupuestos Generales anuales para cubrir este paquete de ayudas. Sin embargo, Asaga Canarias Asaja duda, por los antecedentes con otras líneas del REF, que se cumpla a rajatabla con esta medida.