"Vamos a descongestionar las carreteras para vender más coches". La frase es de Oliver Alonso, CEO del Grupo Domingo Alonso, que ha presentado en el Puerto de Las Palmas su nueva terminal de coches. Un moderno edificio de seis plantas y capacidad para 6.000 vehículos que ha costado 26 millones de euros, la inversión privada más relevante de los últimos 30 años realizada en el puerto de la capital grancanaria, motor ecocómico de la Isla y por extensión de toda Canarias, que estrena una instalación pionera para preparar, distribuir y entregar vehículos a pie de muelle.
La idea de descongestionar para vender más puede parecer contradictoria, pero es la nueva apuesta del grupo isleño: centralizar servicios en el mismo puerto en el que se descargan los coches, lo que evita desplazamientos innecesarios, reduce la contaminación y permite reducir los costes de las operaciones, mejorando el servicio de entrega al cliente.
Más competitividad
El Puerto de La Luz, además, gana en competitividad al abrir un centro especializado en servicios de automoción que es único en Canarias, como destacaron todas las autoridades presentes en el acto, entre ellas el ministro Ángel Víctor Torres, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, su vicepresidente, Manuel Domínguez, o la presidenta de la Autoriadad Portuaria de Las Palmas, Beatriz Calzada.
Otros cargos, como el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, y la alcaldesa de la capital, Carolina Darias, intervinieron en un emotivo vídeo de presentación, igual que los expresidentes de la Autoridad Portuaria Juan José Cardona y Luis Ibarra, artífices con sus decisiones de un proyecto que comenzó a gestarse en 2018 y que lo ha inaugurado ahora Calzada.
Las lágrimas de Oliver
El propio Oliver Alonso no pudo controlar la emoción cuando se refirió a la gestación del proyecto, entonces con su padre al frente de la empresa, Sergio Alonso, ya fallecido, y una saga familiar que cumple ahora 90 años de relación con el Puerto de Las Palmas: primero mediante la exportación de tomates que inició su abuelo y luego con la importación de coches. Entre las firmas que ahora representan destacan primeras marcas como Volswagen, Audi, Skoda, Ducati, Honda, Hyundai y Citroen.
Ese guiño a la historia familiar y los agradecimientos a la "gran familia del puerto" gustó a los asistentes, que llenaron una carpa con un aforo para más de 300 personas. Los nuevos monovolúmnes eléctricos de Volswagen recogían al público a la entrada del edificio y lo llevaban a la última planta de las instalaciones, que es donde se realizó la presentación, con un cuidado picoteo a base de bocadillos, churros y sandwiches con sus respectivas bebidas. Al baño se iba en carricoche eléctrico al estar el servicio en otra planta.
Chapa y pintura
Durante el breve recorrido por las entreñas del inmueble, con 90.000 metros en sus seis pisos de altura, el propio Alonso llevó a Clavijo por las instalaciones, con paradas obligadas en el nuevo tren de lavado, el centro de inspección de vehículos y el taller de chapa y pintura, que tienen más de 1.000 metros cuadrados para poner a punto los automóviles antes de entregarlos a los clientes. Las instalaciones están preparadas para dar servicio de mecánica, acondicionamiento y repostaje de manera autosuficiente, con más de 30 cargadores eléctricos y energías renovables como sistema de alimentación para todo el edificio.
Es, según Alonso, una terminal inteligente, que está preparada para afrontar los "nuevos desafíos", entre ellos los futuros coches autónomos, sin conductor, que están por llegar, o el uso cada vez más generalizado de los drones. El emplazamiento de la nueda sede, que está en la Dársena de África, en plena bocana del muelle Nelson Mandela, parece un sitio privilegiado para manejar estas naves no tripuladas que comienzan a dar servicio en los puertos.
Obstáculos
El CEO de Domingo Alonso se mostró convecido del éxito del nuevo proyecto. "Seremos capaces de vencer cualquier obstáculo", dijo a los asistenes. Uno de esos obstáculos está a 100 metros de distancia, en la terminal de Boluda, que es donde se descargan todos los coches de Las Palmas y donde las marcas competidoras han montado otro centro para almacenar y limpiar sus coches.
Firmas como Renault, Toyota y Opel no irán a las nuevas instalaciones de Domingo Alonso porque tienen un espacio propio en el Puerto de Las Palmas, mientras que Alonso está obligado a trasladar sus coches desde la terminal de Boluda a sus instalaciones en jardineras o grúas. El obstáculo de la competencia, con un proyecto de menor inversión, ha generado tensiones en la Autoridad Potuaria de Las Palmas, con consejeros y organizaciones empresariales que trataron de forzar un acuerdo entre grupos empresariales y patronales (Domingo Alonso se fue a Faconauto tras abandonar Fredica, que es la patronal a la que pertenecen las empresas asociadas con Boluda).