"Los territorios como las Islas son considerados, desde el punto de vista continental, como problemáticos, que tienen dificultad para su desarrollo o que son totalmente inviables. Nos ven como un problema".
Así lo señaló el rector fundador de la Universidad de Cabo Verde y exministro de Educación Superior, Ciencia y Tecnología del Gobierno de Cabo Verde, Antonio Correia e Silva, en una conferencia que impartió en el Parlamento de Canarias con el titulo "El reto de ser pequeños: la gobernanza de los territorios insulares".
Correia realizó este coloquio con motivo de la sexta edición de Campus África, cuyo recibimiento tuvo lugar este jueves en el Parlamento de Canarias con el objetivo de ser un espacio de reflexión sobre los retos de África y hace posible un encuentro entre estudiantes, académicos, profesionales, y emprendedores interesados en el desarrollo y la cooperación sobre todo en el contexto actual de crisis migratoria.
Unir fuerzas en la Macaronesia
El exministro insistió en que hoy en día existe una distancia entre la clase política y los jóvenes porque "hay una idea antipolítica" que "representa un peligro en general". Por ello agradeció la apertura del Parlamento a los estudiantes como un guiño a la unión y a la solidaridad entre las Islas, así como a Campus África por su labor para el encuentro de generaciones y culturas.
Bajo la reflexión de que la insularidad está vista como un problema, Correia planteó la necesidad de constituir la Macaronesia. “Necesitamos transformar esa afinidad que poseemos de historia y geografía en activos de futuro. La Macaronesia existe, pero es necesario que se generen relaciones más fuertes en el ámbito cultural, económico o científico”, pidió.
En su opinión las Islas pueden unir fuerzas porque "en los foros mundiales económicos la definición que se da de una isla es de un pedazo de tierra cercado, con problemas por todos lados y aislado".
Las Islas como punto de riqueza histórica
Basándose en un contexto histórico, Correia recordó que hubo momentos en los que las Islas captaron "la atención del mundo" y que la construcción de los continentes pasó por ellas. “En determinados momentos de la historia, ibéricos, portugueses y españoles entraron en el Atlántico a navegar con fines comerciales para enriquecerse”.
Por ello destacó que los africanos pagaron “muy caro” el no manejar “la tecnología de la navegación” por lo que entregaron islas como Cabo Verde o Santo Tomé, las cuales fueron fundamentales en la conquista del Atlántico a través de sus ciudades-puerto para el abastecimiento de los navíos.
En este sentido Correia puntualizó que el gran reto a seguir es encontrar una cultura más adaptada a la insularidad. Por eso consideró que se debe apostar por la enseñanza universitaria "para repensar nuevos modelos de gobernabilidad que se adapten a las singularidades de las Islas". De esta manera, apuntó, "el reto de ser pequeños podemos decir que en realidad es un reto muy grande”.