Canarias se mantiene en la línea de ser la comunidad autónoma con el gasto medio más bajo de España. Es una tendencia que se ha repetido en los últimos años y que a lo largo de 2022 ha persistido, según los datos que este miércoles ha publicado el Instituto Nacional de Estadística. Unos datos que revelan que la alimentación, el transporte y la vivienda acapararon el 61,39% de los gastos que hicieron las familias canarias, superando en un punto la media nacional. Estos tres ámbitos supusieron 16.877,39 euros de gasto para los hogares canarios.
Para un canario, la vida en 2022 supuso un gasto medio de 10.697,57 euros, mientras que en términos de hogar 27.489,84 euros. Sin duda, en el registro histórico es el mayor gasto que de media ha realizado un isleño. Sin embargo el gasto en comparación con el conjunto nacional es mucho menor, que se situó en 12.779,54 euros. Unos datos que cobran sentido cuando se compara el gasto con los ingresos por comunidades, con una clara tendencia proporcional.
El precio de un techo
En general, el gran acaparador del gasto es la vivienda. Los datos del INE se agrupan en el desembolso realizado en alquiler, agua, electricidad o gas. Este parámetro supuso un agujero en los bolsillos de los canarios del 30,6%. De media, una persona desembolsa en estos gastos 3.273,93 euros, aunque por hogar el gasto se eleva hasta los 8.413,11 euros, según el INE.
En realidad, el pago destinado a vivienda ha disminuido en comparación con 2021 y 2020, cuando la pandemia registró una caída del gasto de las familias. Sin embargo, si se hace una visión más amplia de la estadística y se recurre a la fecha en la que comenzó a calcularse este dato el incremento es notable. En 2006 una familia destinaba en vivienda el 22,90% de su gasto, pero la crisis de 2008 y su alargamiento hasta 2013 hizo que el porcentaje superara el 30%. Con el paso de los años llegó a caer hasta el 27,85% (2017) pero con la pandemia el porcentaje volvió al alza.
Sin duda el alquiler es el gran monopolizador del gasto en el ámbito de la vivienda. Si la vivienda ha supuesto en 2022 el 30,6% del gasto que realizan los hogares canarios, el alquiler alcanza el 24,63% del gasto. La cuesta no analiza los datos de las hipotecas, cuya subida de interés tras la pandemia también ha supuesto un importante pago para las familias.
El mayor gasto en alimento
El segundo gran acaparador del gasto es la alimentación. El porcentaje que un canario gasta en alimentos es el mayor en España. Del total de sus gastos, el 17,17% fue destinado a alimentación y bebidas no alcohólicas. Esto implica que el gasto en alimentación para un isleño supone un porcentaje mayor que para un peninsular, aunque de forma absoluta el gasto de una persona en la península sea mayor que en Canarias.
La carne es el producto en el que más se gasta, con el 3,15% del desembolso, seguido de la leche, huevo y quesos (2,48%) y el pan y los cereales (2,43%), mientras que las legumbres y hortalizas representan el 1,90% del gasto total de los canarios.
Lo que cuesta moverse
El tercer gran acumulador de gasto para los canarios es el transporte, un parámetro que acapara más gasto en las comunidades periféricas que en las más centrales de la península. Para un canario, el transporte supuso en 2022 el 13,62% del gasto, alcanzando los 1.457,17 euros. Sin duda el dinero desembolsado en carburantes en el gran protagonista en este parámetro, ocupando el 5,14% del gasto, seguido del dinero que se destina al parámetro simplemente denominado automóviles, del gasto en mantenimiento (2,58%) y del gasto en transporte aéreo (1,14%).
Más allá de los ámbitos que más ocupan el agujero del gasto, hay otros parámetros que acaparan buena parte del gasto. En términos de porcentaje, siguen la lista los restaurantes y hoteles (8,09%), otros bienes y servicios -donde se agrupa la joyería, los seguros o aparatos eléctricos para el cuidado personal- (7,64%), el ocio y la cultura (4,57%), las comunicaciones (3,85%), los muebles y artículos para el mantenimiento del hogar (4,14%), el vestido y el calzado (3,77%), la sanidad (3,75%), las bebidas alcohólicas (1,51%) y la enseñanza (1,28%).