Un colectivo de agricultores de las zonas de Tegueste, Tejina y Valle de Guerra, en Tenerife, aseguran que llevan meses recibiendo agua regenerada de mala calidad.
Al parecer, según han trasladado a asociaciones del sector primario como Asaga Canarias, el agua está llegando con mucha conductividad generando una alta concentración de salinidad.
La situación puede perjudicar gravemente a los cultivos y al suelo. En esta zona afecta sobre todo a flores y plantas ornamentales, pero también puede tocar a otros cultivos como el plátano o el aguacate.
El pasado lunes Asaga mantuvo una reunión con el área de Medio Natural del Cabildo de Tenerife y su consejera, Blanca Pérez, quien les explicó que la alta conductividad se debe a que se están "forzando las máquinas" en varias instalaciones de la isla para sacar más agua --aunque con menos calidad-- como consecuencia de la emergencia hídrica. No obstante les trasladó que se buscarían soluciones para bajar esa conductividad.
El consejero del Sector Primario de la institución insular, Valentín González, detalló a Atlántico Hoy que en la parte que corresponde a su área –la EDAR de Valle de Guerra la gestiona Consejo Insular de Aguas– hubo un contratiempo puntual.
"A principios de año un vertido del vaciado de una piscina de agua salada supuso que el Terciario de la EDAR de Valle de Guerra (agua regenerada) se tuviera que paralizar por una cuestión técnica", comentó.
Problema a la larga
Antonio López, gerente de la Asociación de Cosecheros y Exportadores de Flores y Plantas Vivas de Canarias (Asocan), explicó a Atlántico Hoy que en los últimos meses han recibido quejas sobre que la calidad del agua está siendo nefasta.
“Se ha incrementado su conductividad pasando por encima de 1.000 siemens. En agua regenerada es raro porque una vez que sale de la central debería estar entre 400 y 500”, aseguró.
El problema es el efecto que puede tener a largo plazo para los cultivos. “La situación no se puede alargar en el tiempo. En nuestro caso afecta a la calidad de las flores y las plantas dejándolas susceptibles a sufrir daños por plagas y enfermedades”.
Depuradora de Santa Cruz
Romeo Rodríguez, viticultor de la Comarca Nordeste, mostró su preocupación por el retraso de la Depuradora de Santa Cruz, obra clave para la comarca. "Actualmente el agua que viene de la Depuradora de Santa Cruz a través de El Tablero llega a la comarca con una conductividad muy alta, 1.900 concretamente, y afecta gravemente a la planta", puntualizó a este medio.
Rodríguez recordó que la depuradora estaba prevista para junio de 2022. Ahora, el Ministerio para la Transición Ecológica ha retrasado para el 11 de diciembre de 2025 el plazo de finalización de estos trabajos. “Con esa ampliación se podría a través de El Tablero, donde hay una planta de tratamiento para la desalación, derivar a la comarca hasta 10.000 metros cúbicos de agua”.
Para la zona de Tegueste, cuyo suelo agrícola es "un secarral" según Rodríguez, consideró como importante que salga adelante el proyecto que conectaría la balsa de Valle Molina a la Mesa Mota. “Dotaría de agua regenerada que vendría de Santa Cruz y daría cobertura suficiente", apuntó Rodríguez.