ACAPER denuncia falta de implicación de los organismos públicos en el sector de la pesca recreativa

Desde el sector demandan que se les reconozca como una actividad de autoconsumo así como que se hace pasar el pescado de Mauritania como canario

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Un pescador en El Hierro / Cabildo de El Hierro
Un pescador en El Hierro / Cabildo de El Hierro

El sector de la pesca recreativa denuncia la falta de implicación en el sector por parte del gobierno autonómico. Así lo ha expresado a Atlántico Hoy Félix Sánchez, representante de la Asociación Canaria de Pesca Recreativa Responsable (Acaper), una entidad sin ánimo de lucro que surgió en febrero del año 2001 y cuyo objetivo es ''defender los intereses de los pescadores de recreo''.

A pesar de que la pesca recreativa es un ámbito dedicado, tal y como indica su nombre, a la pesca de recreo y por hobby, Sánchez señala que este sector tiene muchas carencias. Entre ellas, que llevan desde hace años buscando tener presencia en el Gobierno canario a través de un consejero o director de pesca recreativa.  

De igual manera, el representante de Acaper demanda que se les reconozca como una actividad de autoconsumo. Asimismo asegura que se trata de un ámbito da trabajo a más de 4.000 personas en las islas y que aporta económicamente cerca de 200 millones de facturación anual. A su vez, Sánchez realiza una crítica sobre la entrada de pescado proveniente de otros países que se hace pasar por canario. 

Sin representación en el Gobierno 

El representante de Acaper comenta que desde la asociación llevan muchos años pidiendo tener la mencionada presencia en el Gobierno regional para que se traten los intereses de este sector tan común en las islas. 

Sánchez, que comenta que hasta la actualidad ''no han recibido ayudas de ningún tipo'', incide en que el sector aporta 4.400 empleos a Canarias.  ''Abastecemos al 8% de la población, que somos nosotros y nuestras familias. Además, recogemos pescado kilómetro cero, por lo que no tenemos huella de carbono''. A su vez, resalta que aportan 193 millones de facturación a través de su labor, sobre todo con las aproximadamente 100.000 licencias que hay en Canarias, cuyo precio medio oscila entre los 40 y 60 euros dependiendo de la actividad pesquera. 

Además de la presencia en el Gobierno, desde la asociación piden que se les reconozca como actividad de autoconsumo. ''Otro de nuestro objetivos es que nos miren como autoconsumo de kilómetro cero, pero hasta ahora no lo han hecho porque seríamos una competencia con la pesca profesional'', considera Sánchez. 

Reuniones con organismo públicos 

Desde Acaper señalan que se han reunido con Cabildos y Gobierno de Canarias para comentar su situación y dar a conocer las peticiones que tienen como colectivo de pesca recreativa. ‘’No hemos conseguido solucionar nada. Siempre nos dicen que somos recreativos, que no lo hacemos con afán de lucro sino con afán de recreo, un hobby’’  Al ser pesca recreativa, destacan que no pueden vender el pescado y están obligados a recoger un máximo de kilos al mes. ‘’Nosotros no pedimos vender, sino que se nos tenga en cuenta’’, asegura Sánchez. 

Por otro lado, destacan que durante este año las asociaciones de pesca recreativa se han unido más que nunca llegando a un consenso, por lo que han tenido un gran número de reuniones con instituciones públicas. Félix Sánchez señala que ''gracias a esta unión nos han ido escuchando, y que por ahora en 2021 nos hemos reunido entre cuatro y cinco veces con el director general de de Pesca del Gobierno de Canarias, así como con la consejera Teresa Berastegui e incluso con el Gobierno central''. 

Intrusismo desde otros países 

Atlántico Hoy ya adelantaba el problema del sector primario con la introducción de productos de fuera bajo la titularidad de canarios con el vino o los huevos. Félix Sánchez señala que esta situación también la están sufriendo en el sector pesquero. ''Tanto la pesca profesional como nosotros hemos denunciado que está viniendo bastante producto de Mauritania que se comercializa en las islas como pescado canario'', apunta.   

A su vez, afirma que el tallaje es otro de los problemas a los que se enfrentan ya que ''el pescado entra a las islas destallado, es decir, sin talla. Esa es otra lucha que tenemos con la consejeria, ya que aquí hay unas tallas de captura de pescado, y no entendemos por qué no se obliga a ese pescado de fuera que entre con un tallaje'', indica el representante de Acaper.