La UDG Tenerife entró, hace tiempo, en el selecto club de los grandes de la Liga Iberdrola. Tanto es así, que desde su llegada a la máxima categoría se ha permitido el lujo de codearse con los equipos con mayor potencial, mayor presupuesto y mejores infraestructuras. Ha sabido estar a la altura ante tanto obstáculo y ya se ha asegurado una quinta campaña entre los mejores equipos de España. Su peor puesto, séptimo en la temporada de su debut.
Con 30 puntos en su haber tras 21 jornadas, solo una hecatombe provocará que las blanquiazules pierdan la categoría tras cuatro exitosas temporadas. Una vez remontado el vuelo en las últimas semanas, las de Pier Cherubino se plantean ahora acercarse lo máximo posible al mejor registro como equipo de la élite, los 54 puntos logrados la campaña pasada.
Para ello, las isleñas tienen ante sí un reto mayúsculo por superar, ya que para alcanzar dicha cifra deberán sumar ocho victorias en las nueve jornadas que restan de competición. En su defecto, dada la enorme dificultad que entraña firmar un desenlace que no ha firmado con anterioridad, apostarían por igualar o rebasar los 47 puntos sumados hace tres temporadas (cuando debutaban en la máxima categoría), su segunda mejor marca en la élite.
Con 30 puntos en su haber tras 21 jornadas, solo una hecatombe provocará que las blanquiazules pierdan la categoría tras cuatro exitosas temporadas. Una vez remontado el vuelo en las últimas semanas, las de Pier Cherubino se plantean ahora acercarse lo máximo posible al mejor registro como equipo de la élite, los 54 puntos logrados la campaña pasada.
Para ello, las isleñas tienen ante sí un reto mayúsculo por superar, ya que para alcanzar dicha cifra deberán sumar ocho victorias en las nueve jornadas que restan de competición. En su defecto, dada la enorme dificultad que entraña firmar un desenlace que no ha firmado con anterioridad, apostarían por igualar o rebasar los 47 puntos sumados hace tres temporadas (cuando debutaban en la máxima categoría), su segunda mejor marca en la élite.