La UD Granadilla Tenerife ha anunciado la contratacion de Bárbara Martínez, futbolista internacional con Venezuela, que recalará en las filas del B para ponerse a las órdenes de Antonio González en la Primera Federación. Sus inicios en el mundo del fútbol tuvieron lugar en Estudiantes de Guárico, antes del Caracas CF, donde pudo hacerse con un subcampeonato del Torneo Invitacional Femenino en 2020, quedando máxima goleadora del campeonato. Durante el año 2021, de la mano de Yaracuyanos FC disputó la Copa Libertadores Femenina. En el año 2022, se enfundó la camiseta de la selección venezolana para disputar el torneo sub-20 de CONMEBOL en Chile, donde quedó en cuarta posición.
El presidente de la entidad, Sergio Batista, ha asegurado que “seguimos construyendo un equipo de futuro y Bárbara reúne muchas cualidades para seguir sumando en ese camino. Estamos muy contentos de que ya se encuentre en la isla para comenzar a trabajar con el resto de la plantilla, seguro que nos dará muchas alegrías”. Por su parte, la nueva jugadora azul y blanca se muestra “muy feliz de llegar y compartir con cada una de las jugadoras, ahora quiero entrenar fuerte para poder ganarme un puesto en el equipo”. En cuanto a sus características dentro del campo destaca por “ser una jugadora que le gusta recuperar muchos balones y también crear jugadas para el equipo”.
Talento joven, futuro asegurado
Con el fichaje de la centrocampista de 19 años, la entidad persiste en su apuesta por el talento joven, mirando especialmente a las jugadoras destacadas en el fútbol sudamericano. Así, Bárbara coincidirá en el Granadilla B con compatriotas, algunas también compañeras en la Vinotinto, como Vero Herrera, Wilmary Argüelles, Nay Cáceres o, en el primer equipo, Yerliane Moreno. En el filial granadillero también se desempeñan algunas de la jugadoras más jóvenes del club, como la delantera brasileña Giovaninha o la guardameta argentina Ariana Álvarez.
La apuesta del club por construir un filial que nutra de jugadoras al primer equipo responde sin duda a una estrategia de futuro, incorporando promesas en edad temprana para que crezcan y se consoliden en el club. Con esta misma filosofía se han incorporado también recientemente la nigeriana Gift Monday y la camerunesa Colette Ndzana, así como a principio de temporada la colombiana Gisela Robledo, cuya progresión cortó una lesión de la que todavía se está recuperando.
En el competitivo entorno de la Liga F, los clubes más modestos deben apostar, y hacerlo lo suficientemente pronto, por las futbolistas que despuntarán en los próximos años. A nivel de músculo financiero las diferencias entre clubes son abismales en la Liga Profesional Femenina debido a algunos pertenecen a entidades ya consolidadas en el fútbol masculino. Por este motivo, acertar en el mercado de fichajes se convierte, más si cabe, en una obligación de la dirección deportiva en equipos como el Granadilla para asegurar que la isla continúa representada en la élite del fútbol femenino.