El acierto de cara a portería está lastrando al CD Tenerife en las últimas jornadas con tan solo dos goles, y de penalti, en los cinco partidos más recientes. El centrocampista Álex Corredera admite la falta de goles en jugada pero, al mismo tiempo, resalta que "tanto en Gijón como contra el Eibar generamos suficiente como para marcar". Para el jugador blanquiazul, la solución radica en "tener maldad, llegar al área y creernos que vamos a hacer daño de verdad", es decir, que "el tiro que no sabes si va a entrar, creerte que va ir para dentro", explicó. De cara al derbi Corredera confía en recuperar el gol perdido en las últimas perdidas, así como mantener un balance defensivo que anule al rival porque "el fútbol se juega en todo el campo pero se decide en las áreas", puntualizó.
Para esta misión, Corredera convoca al jugador número 12, la afición, con el objetivo de abarrotar el Heliodoro. "Es necesario un estadio lleno que nos ayude en esos momentos de dificultades que habrá durante el partido" aseguró el centrocampista. En este tipo de encuentros, "donde no hay favoritos" son los pequeños detalles los que marcan el destino del partido por lo que el empuje de la grada será un factor determinante en el devenir de un duelo en el que "las ganas y la motivación lo igualan todo".
Precedentes para aprender
El precedente más cercano ante la UD Las Palmas, en Gran Canaria, cayó del lado amarillo y, de cara al partido del sábado, Corredera sabe que deberán mejorar respecto al encuentro de ida. "Sabemos lo que hicimos mal en la primera vuelta y hemos trabajado para no repetir esos errores" asegura el blanquiazul. Mejor recuerdo le trae al jugador, y a todo el tinerfeñismo, la última visita de los de García-Pimienta al Heliodoro, cuando los blanquiazules se impusieron en la semifinal del playoff por el ascenso, un partido que Corredera toma como referencia.
Como pieza clave en la medular blanquiazul, Corredera ha sido durante para de la temporada una de las ausencias más significativas en las convocatorias de Ramis. Después de ser operado en septiembre, el futbolista precisó de "casi cinco meses" para completar un partido completo y aunque aún arrastra molestias leves en la pisada, asegura que "van a menos pese a la carga de partidos". Con el optimismo de estar en pleno crecimiento, Corredera tiene claro que "las sensaciones son buenas y cada vez me acerco más al Álex que fui", concluyó.