En términos globales, el equipo blanquiazul ha podido celebrar más triunfos que el amarillo (11-9), y no se le da mal las visitas del equipo grancanario al Heliodoro, ya que hace casi veinte años de la última victoria visitante, curiosamente con Pepe Mel en el banquillo tinerfeñista.
Desde aquel triste 1-3 para los intereses blanquiazules en 2001, el CD Tenerife ha conseguido tomarle la medida a la UD Las Palmas, imponiéndose en cinco de los últimos ocho encuentros disputados. El último data de 2014, con un triunfante Cristo Martín, autor del tanto del triunfo local (2-1). Siete son las victorias del CD Tenerife en el Heliodoro en materia liguera, por tres del equipo amarillo, y siete empates.
Solo una vez se vieron las caras en el recinto capitalino como equipos de Primera División, y el resto, en la categoría de plata. El de este sábado, un derbi dramático donde los haya, será el decimoctavo que deberán disputar dos conjuntos que buscan la tranquilidad dentro de una temporada llena de dudas, de muchas sombras y muy pocas luces.