Aitor Sanz, Alberto Jiménez, Bryan Acosta, Luis Milla e Iker Undabarrena conforman el centro del campo del CD Tenerife para la 18/19. Los cinco futbolistas, de perfiles diferentes, lucharán por hacerse un hueco en el once.
La temporada pasada Joseba Etxeberría apostó por jugar con tres mediocentros, Alberto, Milla y un adelantado Acosta terminaron formando una estructura que se consolidó en el último tramo de liga.
DESTRUCCIÓN Y CREACIÓN EN EL CÉSPED
Aitor Sanz es el mediocentro más veterano del equipo, esta que está a un mes de comenzar será su sexta temporada en el CD Tenerife. Tras cinco años siendo titular indiscutible, la temporada pasada perdió algo de protagonismo, fue en la que menos partidos y minutos sumó, debido a una lesión que le duró un tercio de competición.
De un perfil más similar al suyo está Luis Milla, llegó hace media vuelta y se instauró directamente en el once blanquiazul. Definición en los pases y el control de los tiempos de los enfrentamientos caracterizan el fútbol de un jugador que se hace indispensable para la 18/19.
De una forma similar es como desbribió el director deportivo Alfonso Serrano a Iker Undabarrena, primer fichaje de este mercado de verano, en su presentación. Se trata de un futbolista “de equilibrio, con buena salida de balón vertical y que ayudará mucho en la creación, además es tácticamente muy bueno”.
Con unas características más destructivas se encuentra Alberto Jiménez, el de La Oliva está a punto de comenzar su cuarta campaña consecutiva desde que regresó de la cesión. Mediocentro, aunque también con experiencia como central, corta el juego del rival y apuntala la defensa de los suyos.
Completa esta demarcación un futbolista diferente a los anteriores, Bryan Acosta es esfuerzo en las ayudas, sobre todo cuando juega en el centro, y presión, cuando ejerce en la mediapunta, unido a un gran disparo de jugadas a balón parado.