El CD Tenerife se clasificó para la final de la promoción de ascenso a Primera División con una victoria por 1-2 en el Estadio de Gran Canaria. Los blanquiazules realizaron un ejercicio de acierto en ataque y orden defensivo para imponerse de nuevo en el derbi canario y así avanzar hacia la eliminatoria decisiva por un puesto en la máxima categoría del fútbol español. Dos goles de Enric Gallego, uno de cabeza en el minuto 4, y otro de penalti al filo del descanso, dieron una ventaja, a la postre definitiva, que los amarillos no pudieron remontar a pesar del gol de Eric Curbelo en la segunda parte. El Tenerife disputará la ronda final por el ascenso los días 11 y 19 de junio, jugando como local en el primer partido de la eliminatoria si se enfrenta al Eibar, o como visitante en caso de que su rival sea el Girona.
Gallego golpea pronto
El Tenerife empezó a buscar la portería rival desde el primer minuto, cuando Gallego recogió un rechace en el área y disparó de volea, aunque Vallés blocó sin dificultades. Pero el delantero blanquiazul tenía el gol entre ceja y ceja desde el balón al larguero que envió en el Heliodoro y, en la siguiente jugada, cumplidos tan solo cuatro minutos de juego, adelantó a los tinerfeños. En la acción del gol, la zaga amarilla despejó en primera instancia un saque de esquina pero el balón volvió al costado derecho, donde Corredera centró de nuevo para que Gallego se alzara con un cabezazo, anticipándose a la salida del portero. A pesar del despeje de Raúl Navas, el balón había sobrepasado claramente la línea de gol por lo que el colegiado, previa revisión del VAR, concedió el tanto.
Con el marcador a favor, el Tenerife se centró en labores defensivas y, aunque Las Palmas dominaba, no conseguía inquietar la meta blanquiazul. Un remate de cabeza de Rober y una falta lejana de Viera acabaron en las manos de Soriano. Los amarillos intentaban romper el dispositivo defensivo de Ramis, pero el área tinerfeña estaba muy poblada. Shaq Moore abortó una de las acciones con más peligro, cuando Moleiro controló en el área zafándose de su marca, pero el internacional estadounidense salió en la ayuda y evitó un disparo con mucha ventaja para el atacante amarillo.
Lesión de Viera y penalti para el Tenerife
Mientras, el Tenerife buscaba aprovechar los contragolpes y las imprecisiones de la defensa amarilla. Gallego y Mario González presionaban la salida de balón y a punto estuvieron de encontrar una jugada de peligro. A medida que pasaban los minutos, el dominio de Las Palmas iba creciendo y parecía que los de García Pimienta encontrarían en algún momento el premio a su insistencia. Pero entonces, Jonathan Viera, el director de la orquesta amarilla, se echó al verde aquejado de unas molestias en el muslo. El capitán grancanario abandonó el campo entre lágrimas, sustituido por Maikel Mesa.
Al filo del descanso, las malas noticias se acumularon para los locales. En una disputa por un balón en el área, Raúl Navas impactó con el codo en la cara de Mollejo, que se fue al suelo. El árbitro fue requerido a revisar la acción y, tras consultar la pantalla, dictaminó penalti a favor del Tenerife. El encargado de tirarlo fue Gallego que disparó sin mucha potencia ni colocación a la derecha de Vallés. A pesar de que el portero adivinó la intención y llegó a interceptar el disparo, el balón se coló entre sus manos. Así, el Tenerife marchó al vestuario con ventaja de 0-2.
Reanudación
En la segunda parte Las Palmas salió en tromba con un primer disparo de Sergi Cardona que alimentó las esperanzas del Estadio de Gran Canaria. Con prisa y sin Viera ni Jesé, que fue sustituido por Benito Ramírez, los amarillos empezaron a buscar un juego más directo, con balones al área y algo menos de elaboración. Pero los de Ramis aguantaron el arreón inicial y volvieron a llevar la calma al partido, desactivando las opciones ofensivas de los locales.
Aún así, en el minuto 70 Las Palmas encontró el acierto de cara a portería cuando Curbelo se adelantó a Mellot para cabecear el saque de esquina de Benito y recortar distancias. La hinchada amarilla quiso creer en la heroica pero Ramis refrescó la defensa con la salida Sipcic, y el centro del campo con la de Michel. El dibujo táctico blanquiazul se componía de una línea de cinco atrás, una de cuatro en el centro del campo y, arriba, solo Andrés Martín, escoltado por Elady en las jugadas de contraataque.
700 eufóricos
El reloj corría a favor de los tinerfeños y la muralla blanquiazul, a excepción del gol en jugada a balón parado de Curbelo, se mostraba inexpugnable. El cansancio comenzaba a hacer mella en ambos equipos pero era Las Palmas quien tenía que proponer. El Tenerife solo aceleraba el ritmo cuando Andrés Martín salía en velocidad para asociarse con Elady, que contó con alguna ocasión de sentenciar, pero no estuvo acertado.
Después de cinco minutos de tiempo añadido, la euforia llegó para los cerca de 700 aficionados del Tenerife, entre más de 30.000 hinchas amarillos, que celebraron la clasificación con el pitido final. La frustracion se adueñó de Pejiño, expulsado tras encararse con el árbitro cuando el tiempo ya estaba cumplido. Finalmente el Tenerife sale victorioso de dos derbis canarios en una semana y se clasifica para la final de la promoción de ascenso a Primera División, donde esperan Eibar o Girona.
UD Las Palmas:
Álvaro Vallés, Álvaro Lemos, Raúl Navas, Eric Curbelo, Sergi Cardona, Kirian, Jonathan Viera, Mfulu, Rober González, Moleiro, Jesé.
Sustituciones: Maikel Mesa por Jonathan Viera (40'), Benito Ramírez por Jesé (45'), Mujica por Rober (65'), Pejiño por Moleiro (72'), Alex Suarez por Raúl Navas (72').
Tarjetas amarillas: Jonathan Viera, Raúl Navas.
Tarjetas rojas: Pejiño.
CD Tenerife:
Juan Soriano, Shaq Moore, Sergio González, José León, Mellot, Aitor Sanz, Corredera, Mollejo, Bermejo, Mario González, Enric Gallego.
Sustituciones: Andrés Martín por Mario González (60'), Pomares por Bermejo (60'), Elady por Mollejo (76'), Michel por Gallego (80'), Sipcic por Corredera (80').
Tarjetas amarillas: Aitor Sanz, Pomares, Gallego.