El actor estadounidense John Malkovich, que este domingo estrena en Canarias "The Infernal Comedy", donde encarna a un asesino en serie rodeado de una orquesta barroca y dos sopranos, ha explicado que la música ayuda a su personaje a expresar lo que no es capaz de admitir que siente.
Así lo ha manifestado en una rueda de prensa el protagonista de esta producción del festival "Veranos del Taoro", junto a su director de escena, Michael Sturminger, quien ha subrayado que las seis piezas musicales incluidas en la obra, a cargo de la orquesta barroca ‘Wiener Akademie’, dirigida por Martin Haselblöck, y las sopranos Chen Reiss y SusanneLangbein, simbolizan lo que cuenta el texto.
Este ha sido uno de los retos a la hora de idear y poner en escena este proyecto, estrenado en 2009 y que se ha retomado recientemente: intercambiar textos con piezas de ópera para un público seguidor de Malkovich, no acostumbrado a la música lírica, y que, por tanto, desconoce sus códigos, ha referido Sturminger.
"Una obra de mierda"
El dramaturgo ha recalcado que, pese al parecido que pudiera encontrarse entre el título de esta obra, "Confesiones de un asesino en serie", en español, y la "Divina Comedia", de Dante Alighieri, nada tiene que ver con ella, respecto a la que se posiciona, ha dicho, como "una obra de mierda".
Sobre su interpretación, que se intercala con piezas de Vivaldi, Haydn, Mozart, Beethoven, Boccherini, Weber y Gluck, el intérprete americano, dos veces candidato al Oscar y tres a los Globos de Oro y quien no ha querido hablar de futuros proyectos profesionales por respeto a la huelga convocada en Hollywood por el sindicato de actores SAG-AFTRA, ha explicado que no sigue un proceso creativo concreto a la hora de ponerse en la piel de su personaje, Jack Unterweger, un asesino en serie que se hizo escritor y periodista en la cárcel.
Se trata, ha explicado, de conocer bien la música, el texto y, sobre todo, el lugar dónde se representará la obra "y estar abierto a los elementos causales que rodean el estreno en cada sitio, porque eso determina la puesta en escena".
Precisamente, en la disparidad de formatos en los que se representará esta obra en Canarias, el Auditorio Alfredo Kraus, en Las Palmas de Gran Canaria, Los Jameos del Agua, en Lanzarote (un tubo volcánico), y al aire libre en el Puerto de La Cruz, en Tenerife, reside uno de sus atractivos, según ha destacado el director del festival "Veranos del Taoro", Enrique Camacho, responsable de traerlo a las islas.