Promocionar el talento canario, impulsar la industria textil y perseguir un modelo de negocio más sostenible: el Cabildo de Tenerife defendía en la presentación de la feria Volcanic Fashion Tenerife, que este fin de semana ha vuelto a las pasarelas, que estas serían las piedras angulares en esta edición. Si bien las dos primeras de estas banderas se consiguen solo con la celebración, para última todavía queda mucho recorrido, tal y como han explicado algunos de los diseñadores que a lo largo de este fin de semana han expuesto sus prendas y accesorios en el Recinto Ferial de Santa Cruz de Tenerife.
Tras la reactivación en 2021 de los eventos de moda, 2022 ya marca el camino para solucionar los futuros retos de la industria, con la sostenibilidad como objetivo, aunque está claro que el mero hecho de la insularidad y de la necesidad de transportar prendas y materiales hace difícil ponerse esa etiqueta. Pese a ello, las marcas se han ido concienciando más en origen: compran telas recicladas, reutilizan los sobrantes o buscan proveedores que sean responsables con el medioambiente.
Hacia el diseño sostenible
Carolina Hernández es la diseñadora de Amanita, es quien más crítica se ha mostrado al ser preguntada por lo sostenible de la Volcanic Fashion Tenerife y de la moda tinerfeña. “Sostenibilidad no veo ninguna”, comenta. Empezando por el evento señala las moquetas, los plásticos de la comida y bebida, las plantas artificiales o la propia iluminación del recinto, que claramente no proviene de fuentes de energía renovable. “Que vaya resonando el nombre y lo que es el principio sí, pero que exista, no”, defiende en este sentido. Lo dice la diseñadora de una marca cuyas telas son recicladas.
Por la parte de los complementos, en la moda tinerfeña optan más por los materiales naturales que por aquellos que requieren de una mayor manufactura. Elisa, diseñadora de Sunny and Funny explica que en este aspecto, en algunos de sus productos, utiliza piedra e incluso corales. “Hay que tener en cuenta el tema ecológico”, explica.
También Elisa, pero de la marca Maharani, comenta que cada vez está incorporando más el concepto a su negocio. Explica que las telas donde mete sus complementos son recicladas, pero también las piezas que finalmente no se venden las desmonta y reutiliza los materiales. “Mantiene ese ciclo y no haces un despiece de material para tirarlo a la basura”, explica. Piedras, perlas de río, cristales son la base de sus complementos, en los que también incorpora madera y esmaltados. “Nos estamos concienciando más. Incorporando todos nuestro granito de arena podemos el día de mañana hacer que esto cambie”, defiende. Y explica que hoy en día hay una mentalidad diferente a la que “había hace unos años”.
En este sentido, Ariadna de La Trobadora explica que sí es un concepto que cada vez se tiene más en cuenta, pero que hay marcas que son más sostenibles que otras. “Todos intentamos poner nuestro granito de arena pero es complicado a veces”, defiende.
Otro modelo posible
Pero más allá de los materiales usados, la intención del Cabildo de Tenerife este año ha sido la de emprender la senda de un modelo de negocio sostenible, algo urgente en la que es la segunda industria más contaminante del mundo. Con Asia como principal continente emisor de materiales para las marcas canarias es relevante quitar esa sobrecarga de emisiones que incorpora el traer todas las piezas. Además de que se vaya incorporando cada vez más el concepto de la circularidad de las prendas.
Para que el camino de la sostenibilidad sea un rumbo que tomen decididamente las marcas canarias, durante la feria se ha celebrado la ponencia “De la materia prima al usuario/ usuaria: 50 claves para una industria de la moda circular y sostenible” a cargo de Polka Press Comunicación. También se ha realizado una exposición de sostenibilidad a lo largo de todo el fin de semana.